MADRID, 1 Abr. (EUROPA PRESS) -
Una nueva investigación del Karolinska Institutet en Estocolmo (Suecia) sostiene la necesidad de rebajar o eliminar la recomendación actual de un aumento de peso de, al menos, 5 kilos en mujeres con obesidad durante su embarazo.
Las directrices internacionales del Instituto de Medicina de EEUU (IOM) establecen que las mujeres con obesidad deben ganar un total de 5 a 9 kilos durante el embarazo, frente a los 11,5 a 16 kilos de las mujeres con peso normal. Estas directrices se han cuestionado durante mucho tiempo, pero no ha habido pruebas que justifiquen un nuevo examen.
Este nuevo estudio, publicado en 'The Lancet', demuestra que no hay mayores riesgos para la salud ni de la madre ni del niño con un aumento de peso por debajo de las directrices actuales para las mujeres con obesidad de clase 1 y 2 (IMC de 30-34,9 y 35-39,9 respectivamente). Por el contrario, en el caso de las mujeres con obesidad de clase 3 (IMC superior a 40), el aumento de peso por debajo de las directrices actuales podría ser incluso beneficioso.
Según Kari Johansson, docente del Departamento de Medicina de Solna, el estudio respalda anteriores llamamientos a rebajar o eliminar el actual límite inferior recomendado de un aumento de peso de al menos 5 kg. "Esperamos que nuestra investigación pueda servir de base para reexaminar las directrices nacionales e internacionales sobre el aumento de peso durante el embarazo", afirma.
El estudio se basa en historias clínicas electrónicas y datos de registro de 15.760 mujeres con obesidad de Estocolmo y Gotland (la llamada Cohorte Perinatal de Estocolmo y Gotland). 11.667 de las mujeres del estudio tenían obesidad de clase 1; 3.160 de clase 2 y 933 de clase 3. El estudio incluyó embarazos únicos que dieron a luz entre 2008 y 2015. Las mujeres fueron seguidas durante una mediana de ocho años después del parto.
Se estudiaron diez resultados adversos conocidos asociados con el aumento de peso durante el embarazo: preeclampsia, diabetes gestacional, retención excesiva de peso posparto, enfermedad cardiometabólica materna, parto por cesárea no planificado, parto prematuro, grande para la edad gestacional o pequeño para la edad gestacional al nacer, mortinato y muerte infantil. Estos resultados adversos se ponderaron en función de su gravedad y se combinaron en un resultado adverso compuesto.
En general, el estudio no muestra un aumento del riesgo de los resultados adversos compuestos con un aumento de peso por debajo de las directrices actuales del IOM en mujeres con obesidad de clases 1 y 2. Por el contrario, en el caso de las mujeres con obesidad de clase 3, los valores de aumento de peso por debajo de las directrices o la pérdida de peso se asociaron a una reducción del riesgo del resultado compuesto adverso. Por ejemplo, la ausencia de aumento de peso (es decir, 0 kg) se asoció a una reducción del riesgo de aproximadamente el 20 por ciento.
"Basándonos en esto, hemos llegado a la conclusión de que el aumento de peso por debajo de las recomendaciones actuales es probablemente seguro en embarazos con obesidad, e incluso podría ser beneficioso para aquellas con obesidad de clase 3", afirma Kari Johansson.
Los resultados también indican que había necesidad de recomendaciones específicas para las mujeres con obesidad de clase 3. "A diferencia de lo que ocurre hoy, este grupo podría recibir recomendaciones separadas", ha asegurado Kari Johansson. Los investigadores procederán ahora a realizar estudios similares en mujeres con sobrepeso, peso normal y bajo peso.
