MADRID, 23 Nov. (EUROPA PRESS) -
Las muertes por cáncer de los próximos 20 años en Japón o en cualquier otra parte del planeta podrían estar provocadas por el accidente que sufrió la central nuclear de Fukushima Daiichi (Japón) el pasado 11 de marzo, porque esto será imposible de determinar, según ha explicado el catedrático de física atómica de la Universidad de Alcalá, Julio Gutiérrez Muñoz.
Durante el Congreso Nacional de Periodismo Ambiental, organizado por la Asociación de Periodistas de Información Ambiental (APIA) en Caixa Forum, Gutiérrez ha añadido que tanto el terremoto como el posterior tsunami culpable del accidente nuclear han dado ya más víctimas que las probables en los próximos 50 años como consecuencia de lo acontecido en Fukushima Daiichi como consecuencia de la exposición a la radiación. En todo caso, a su juicio, la "clave" para evitar riesgos y afrontar el desafío de la energía en el futuro está en cambiar el estilo de vida hacia otro más austero y en el fomento del ahorro energético.
Además, el director general de aseguradores de riesgos nucleares, Julián Gómez del Campo, ha subrayado que la problemática tras el accidente de Fukushima no ha cambiado nada la valoración de riesgos a raíz de este accidente y ha apuntado que los aseguradores españoles (Espanuclear) tiene un fondo de solvencia previsto para estos riesgos de 12 millones de euros.
Asimismo, José Antonio Aparicio, el presidente en España de IAEM, una organización internacional que reúne a más de 5.000 profesionales dedicados a la gestión de emergencias, la protección civil y la seguridad pública, ha destacado que "no existe" a nivel nacional una directriz básica de protección civil que marque las pautas a seguir para la elaboración de Planes Especiales que sepan hacer frente a la contaminación medioambiental por vertidos tóxicos, como por ejemplo el de hidrocarburos, a la que ha definido como "una de las mayores lacras que afectan a la franja litoral costera" y especialmente en aquellos puntos receptores de grandes petroleros, como Galicia y la Bahía de Algeciras.
En este sentido, ha añadido que el único plan existente es el Plan Nacional de Contingencias de 2002, elaborado por el Ministerio de Fomento. Sin embargo, ha precisado que este no es un Plan de Protección Civil y que por tanto no tiene en cuenta la normativa, la estructura ni la operatividad del sistema español de protección civil. "En la práctica, es un plan que va a su aire", ha apostillado.
Al mismo tiempo, ha denunciado que en España los resultados de las investigaciones de los accidentes industriales, "si llegan a realizarse, raramente se publican completos" porque la información suele ser sesgada y a retazos y normalmente llega tarde.
Por su parte, la técnica en energía del programa de cambio climático de WWF España, Raquel García Montón, ha criticado la energía nuclear por los riesgos que conlleva en caso de catástrofes naturales y accidentes industriales, al tiempo que se ha referido a los desastres ambientales que se derivan de los combustibles fósiles. Finalmente, ha explicado la propuesta energética de la ONG respecto al modelo energético, y ha expuesto los proyectos y trabajos recientes en este sentido.
Finalmente, el director del laboratorio de estudios cristalográficos del CSIC y de la Universidad de Granada, Juan Manuel García Ruiz ha aportado su testimonio personal durante el terremoto de Japón y la crisis nuclear de Fukushima, ya que en aquellas fechas estaba visitando el país nipón.
A este respecto, ha aportado una visión directa de los acontecimientos y ha concluido que, en su opinión, se necesita "profundizar mucho más" en investigación y en un mayor conocimiento del funcionamiento de los sistemas naturales a la hora de prevenir las circunstancias que dan lugar a catástrofes.