Los movimientos espontáneos de los bebés tienen un propósito importante para el desarrollo del sistema sensoriomotor

Archivo - Madre mirando a su bebé en la cuna.
Archivo - Madre mirando a su bebé en la cuna. - ISTOCK/MDPHOTO16 - Archivo
Publicado: martes, 27 diciembre 2022 7:49

MADRID, 27 Dic. (EUROPA PRESS) -

Los movimientos espontáneos y aparentemente aleatorios de los bebés contribuyen al desarrollo de su sistema sensoriomotor, según una nueva investigación dirigida por la Universidad de Tokio (Japón) publicada en la revista 'Proceedings of the National Academy of Sciences'.

La captura detallada del movimiento de recién nacidos y lactantes se combinó con un modelo informático musculoesquelético para permitir a los investigadores analizar la comunicación entre los músculos y la sensibilidad en todo el cuerpo.

Los investigadores descubrieron patrones de interacción muscular que se desarrollaban a partir del comportamiento exploratorio aleatorio de los bebés y que más tarde les permitirían realizar movimientos secuenciales cuando eran bebés. Entender mejor cómo se desarrolla nuestro sistema sensoriomotor podría ayudarnos a comprender mejor el origen del movimiento humano y a diagnosticar antes los trastornos del desarrollo.

Los bebés desde que nacen, e incluso en el vientre materno, los bebés empiezan a dar patadas, contonearse y moverse aparentemente sin objetivo ni estimulación externa. Son los llamados "movimientos espontáneos", y los investigadores creen que desempeñan un papel importante en el desarrollo del sistema sensoriomotor, es decir, nuestra capacidad para controlar los músculos, el movimiento y la coordinación.

Si se consigue entender mejor estos movimientos aparentemente aleatorios y su implicación en el desarrollo humano temprano, quizá sea posible identificar indicadores precoces de ciertos trastornos del desarrollo, como la parálisis cerebral, indican los investigadores.

En la actualidad, los conocimientos sobre cómo aprenden a mover el cuerpo los recién nacidos y los lactantes son limitados. "Las investigaciones anteriores sobre el desarrollo sensoriomotor se han centrado en las propiedades cinemáticas, es decir, en las actividades musculares que provocan el movimiento de una articulación o de una parte del cuerpo", explica el profesor adjunto del proyecto Hoshinori Kanazawa, de la Escuela de Postgrado de Ciencia y Tecnología de la Información.

"Sin embargo, nuestro estudio se centró en la actividad muscular y las señales de entrada sensorial de todo el cuerpo --prosigue--. Combinando un modelo musculoesquelético y un método neurocientífico, descubrimos que los movimientos espontáneos, que parecen no tener una tarea o propósito explícito, contribuyen al desarrollo sensoriomotor coordinado".

En primer lugar, el equipo grabó los movimientos articulares de 12 recién nacidos sanos (de menos de 10 días) y 10 lactantes pequeños (de unos 3 meses) utilizando tecnología de captura de movimiento. A continuación, calcularon la actividad muscular y las señales sensoriales de los bebés con ayuda de un modelo informático musculoesquelético a escala infantil que habían creado. Por último, utilizaron algoritmos informáticos para analizar las características espaciotemporales (espacio y tiempo) de la interacción entre las señales de entrada y la actividad muscular.

"Nos sorprendió que, durante el movimiento espontáneo, los movimientos de los bebés 'divagaban' y perseguían diversas interacciones sensoriomotoras. Denominamos a este fenómeno 'deambulación sensoriomotora'", explica Kanazawa.

"Se ha asumido comúnmente que el desarrollo del sistema sensoriomotor depende generalmente de la ocurrencia de interacciones sensoriomotoras repetidas, lo que significa que cuanto más se realiza la misma acción, más probable es que se aprenda y recuerde --señala--. Sin embargo, nuestros resultados implican que los bebés desarrollan su propio sistema sensoriomotor basándose en conductas de exploración o en la curiosidad, por lo que no se limitan a repetir la misma acción, sino una variedad de acciones. Además, nuestros hallazgos proporcionan un vínculo conceptual entre los movimientos espontáneos tempranos y la actividad neuronal espontánea".

Estudios anteriores en humanos y animales han demostrado que el comportamiento motor (movimiento) implica un pequeño conjunto de patrones primitivos de control muscular. Se trata de patrones que suelen observarse en movimientos cíclicos o específicos de una tarea, como caminar o alcanzar objetos.

Los resultados de este último estudio apoyan la teoría de que los recién nacidos y los lactantes pueden adquirir módulos sensoriomotores, es decir, actividades musculares sincronizadas y entradas sensoriales, mediante movimientos espontáneos de todo el cuerpo sin un propósito o tarea explícitos.

Incluso a través de la deambulación sensoriomotora, los bebés mostraron un aumento en los movimientos coordinados de todo el cuerpo y en los movimientos anticipatorios. Los movimientos realizados por el grupo de bebés mostraban patrones más comunes y movimientos secuenciales, en comparación con los movimientos aleatorios del grupo de recién nacidos.

A continuación, Kanazawa quiere estudiar cómo afecta la deambulación sensoriomotora al desarrollo posterior, como caminar y alcanzar objetos, junto con comportamientos más complejos y funciones cognitivas superiores. "Mi formación original es en rehabilitación infantil --comenta--. Mi gran objetivo a través de mi investigación es comprender los mecanismos subyacentes del desarrollo motor temprano y encontrar conocimientos que ayuden a promover el desarrollo del bebé".