MADRID, 18 Nov. (EUROPA PRESS) -
La tasa de mortalidad para los pacientes mayores de 40 años es casi el triple respecto a la población general cuando el hospitalizado por coronavirus padece además Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), según los resultados de un estudio dirigido por investigadores españoles, a partir de miles de historias clínicas analizadas con inteligencia artificial y procesamiento del lenguaje natural.
La investigación, realizada por los doctores José Luis Izquierdo del Hospital Universitario de Guadalajara y Joan B. Soriano y Julio Ancochea del Hospital La Princesa de Madrid con la plataforma de inteligencia artificial Savana, es relevante porque esta patología pulmonar representa la cuarta causa de muerte en el mundo. Asimismo, los pacientes con EPOC tienen mayor propensión a cardiopatía isquémica y otros factores que les ponen en riesgo por complicaciones asociadas a la COVID-19.
El estudio, publicado en la revista 'Journal of Clinical Medicine', forma parte del estudio internacional 'Big COVIData' que puso en marcha Savana al inicio de la pandemia. Revela que el perfil del enfermo con EPOC más propenso a coronavirus es varón (en cuatro de cada cinco casos), con 75 años de edad y otras patologías añadidas (diabetes, arritmias, insuficiencia cardíaca, entre otras).
Para el estudio, se partió de una muestra de datos de pacientes en Castilla-La Mancha, posteriormente filtrados y analizados de forma anonimizada entre el 1 de enero y el 10 de mayo con la tecnología 'EHRead' de Savana. La plataforma arroja respuestas y predicciones clínicas de calidad en un tiempo récord para mejorar la gestión médica y los tratamientos de los pacientes.
"Una de las principales preocupaciones que tuvimos cuando aparecieron los primeros casos de COVID-19 era conocer cuál iba a ser su impacto en las patologías respiratorias crónicas. Pronto supimos que la gravedad era mayor en pacientes hipertensos, diabéticos o con enfermedad cardiovascular. Este estudio, que recientemente hemos publicado, supone una de las series más amplias de la literatura médica sobre el impacto de la COVID-19 en pacientes con EPOC utilizando 'Big data' e inteligencia artificial", explica el doctor José Luis Izquierdo Alonso, Jefe de Neumología del Hospital Universitario de Guadalajara y uno de los tres investigadores del estudio.
Del total de pacientes involucrados en la nueva investigación, algo más de 31.600 padecían EPOC, y un total de 793, asimismo coronavirus. En población sin EPOC, solo con COVID-19, la cifra se situó en 13.546. De los resultados se desprende que los enfermos de EPOC muestran tasas más altas de diagnóstico de la COVID-19 (2,51%) que la población mayor de 40 años que carece de patología respiratoria (1,16 %). Además, las tasas de hospitalización por coronavirus en enfermos con EPOC se sitúan en el 40 por ciento frente a poco más del 31 por ciento, respectivamente.
Asimismo, los porcentajes de mortalidad de quienes ingresan en el hospital casi se triplican cuando los enfermos de coronavirus tienen además EPOC, cuyas tasas se sitúan en el 9,3 por ciento, frente al 3,4 por ciento de las personas hospitalizadas con más de 40 años solo con COVID-19 que carecen de EPOC.
En cuanto al perfil del paciente con EPOC más propenso de contagiarse con el nuevo coronavirus, los datos desvelan que se trata de un varón en el 83 por ciento de los casos, con una media de edad de 75 años, frente a los 66 de media de la población general con coronavirus entre quien la predisposición a esta enfermedad apenas varía entre hombres y mujeres.
Los pacientes con EPOC y COVID-19 muestran mayor prevalencia de comorbilidad o enfermedades añadidas que quienes solo tienen coronavirus, y los pacientes del primer grupo fuman además con mayor asiduidad.
Por otra parte, la neumonía fue el diagnóstico más común entre los pacientes con EPOC hospitalizados a causa del coronavirus (59%). El 19 por cinto de los pacientes mostraba infiltraciones pulmonares sugestivas de neumonía e insuficiencia cardíaca.
"La principal conclusión de este estudio es que los pacientes con EPOC tienen el doble de riesgo de contraer la enfermedad y cuando esto ocurre tres veces más posibilidades de fallecer. Esto no debe servir para generar angustia en los pacientes sino para extremar las medidas de autoprotección, especialmente con los contactos que tienen a su alrededor, pero sin prescindir de una vida activa, ya que mantener una actividad física regular va a ser muy importante para el control de la enfermedad", asegura el doctor Izquierdo.