MADRID 11 Feb. (EUROPA PRESS) -
La mortalidad por legionelosis se sitúa entre 1 por ciento y 10 por ciento y la incidencia entre 20-30 casos por cada 100.000 habitantes, según han informado diversos expertos en la 'II Jornada Prevención y control de la legionelosis: nuevas perspectivas', organizada por el Centro de Salud Pública de Denia.
La legionelosis se contrae al inhalar aerosoles acuosos contaminados con la bacteria como, por ejemplo, en la ducha. Cursa con síntomas parecidos a otras neumonías y no suele dejar secuelas y la mortalidad en pacientes hospitalizados es muy variable --en base a la patología previa del paciente-- pero globalmente no supera en la actualidad el 15 por ciento.
Además, afecta, de manera especial, a los mayores de 60 años, fumadores, alcohólicos y personas con enfermedades subyacentes que pueden hacer peligrar el sistema inmunológico. "Dadas las características de los pacientes ingresados, el riesgo de enfermar es especialmente relevante en los hospitales", ha explicado el presidente de la Sociedad Valenciana de Medicina Preventiva y Salud Pública, el doctor Ortí.
En este sentido, los expertos han recordado que los sistemas de agua caliente de los propios edificios, las torres de enfriamiento, las máquinas de vapor e hidromasajes, son fuentes comunes de infección. Asimismo, las instalaciones de suministro de agua de grandes edificios como hospitales, hoteles o residencias son especialmente sensibles a la proliferación de la bacteria.
"La 'Legionella' es una bacteria saprófita, que crece fácilmente y se adapta muy bien al medio acuoso, especialmente en los equipos de enfriamiento de agua como las torres de refrigeración y condensadores evaporativos, o incluso, inmersa en las redes distribución del agua, sobre todo si existe un 'biofilm' de restos biológicos importante. Por tanto el riesgo real de proliferación de la bacteria en los hospitales españoles es muy evidente", ha zanjado Ortí.