1 de cada 10 personas con adicciones empezó a consumir antes de los 14 años
MADRID, 16 Oct. (EUROPA PRESS) -
El 49 por ciento de las mujeres y el 45 por ciento de los hombres que acuden a tratamiento por adicciones con sustancia presenta una enfermedad psíquica de forma simultánea, según revela el informe 'Perfil de las adicciones en 2024', elaborado por la Red de Atención a las Adicciones (UNAD).
"No podemos aventurarnos a saber en cada caso si la adicción llegó primero o si el problema de salud mental fue el primero porque son fenómenos que pueden tener una relación directa, indirecta o simplemente puede que no la tengan", ha explicado este jueves en rueda de prensa la secretaria general de UNAD, Encarnación Pámpanas.
Por ello, ha abogado por abordar cada caso de forma específica y desde la colaboración entre la red de salud mental y la red de adicciones. "Los datos nos están dando un toque de atención para que los esfuerzos en este sentido se redoblen", ha aseverado.
La décima edición del informe de UNAD reúne datos de 37.889 personas con problemas de adicciones con o sin sustancia que fueron atendidas el año pasado por 102 entidades de la red. De estas, 36.595 fueron personas atendidas por adicciones con sustancia, mientras que 1.304 eran personas con adicciones sin sustancia.
En lo que respecta al perfil de las personas atendidas por adicciones con sustancia, Pámpanas ha apuntado que la presencia de mujeres se mantiene "estable" respecto a otros años. De cada cinco casos que piden ayuda, solo una persona es mujer. Suele ser una mujer adulta mayor de 34 años y de nacionalidad española, con estudios primarios, desempleada y reside en una vivienda familiar.
A este respecto, desde UNAD se ha enfatizado la situación de vulnerabilidad de las mujeres, advirtiendo de que llegan más tarde a los recursos, tienen miedo al juicio social y sufren con más dureza el estigma.
En lo relativo a los hombres, se repiten muchos patrones, siendo lo habitual un adulto de entre 34 y 41 años, español, con estudios primarios, desempleado y que reside en una vivienda de un familiar. La diferencia frente a las mujeres es que no suele tener hijos.
Entre las mujeres atendidas, la sustancia más prevalente es el alcohol (31%), seguida de la cocaína (26%), el cannabis (14%) y la heroína (9%). En los hombres, la principal sustancia de consumo es la cocaína (31%), seguida del alcohol (21%), la heroína (16%) y, en menor medida, el cannabis (13%). En términos comparativos, se observa que las mujeres presentan mayor prevalencia en el consumo de alcohol, cannabis, tabaco, ansiolíticos y somníferos (con y sin prescripción), mientras que los hombres concentran los mayores porcentajes en cocaína, heroína, estimulantes1 y drogas de síntesis.
En ambos casos es frecuente que la persona lleve más de 11 años consumiendo, de hecho en torno a la mitad empezaron a consumir antes de cumplir la mayoría de edad, una tendencia que se está consolidando. Además, destaca que una de cada 10 personas con adiciones empezó a consumir antes de los 14 años.
En este punto, la secretaria de la entidad ha destacado que se trata de "un panorama en el que la minoría de edad no representa ni siquiera un hándicap a la hora de acceder al alcohol o al tabaco".
ADICCIONES SIN SUSTANCIA
Por otra parte, el informe recoge la situación de 1.304 personas atendidas por adicciones sin sustancia en 24 entidades de la red UNAD. De estas, una de cada cuatro es mujer (24%).
Entre mujeres y hombres el perfil es similar, ya que en su mayoría son personas de nacionalidad española, con estudios de secundaria y empleadas. Aspectos diferenciadores tienen que ver con la edad, pues la mayoría de mujeres tienen más de 49 años, mientras que los hombres se sitúan entre los 34 y los 41 años, así como con la descendencia, ya que ellos no suelen tener hijos.
La principal adicción presencial en mujeres son las máquinas tragaperras (43%), seguida del bingo (29%), y en lo que respecta a las adicciones 'online' predominan los videojuegos y también el bingo. En hombres, las máquinas tragaperras son la adicción mayoritaria (43%), seguidas de las apuestas deportivas, que representan un 28 por ciento y predominan en el entorno 'online'.
En otras adicciones sin sustancia, las redes sociales prevalecen para ambos sexos. Respecto al consumo de sustancias asociado a estos comportamientos adictivos, en las mujeres lo más normal es tabaco y alcohol, mientras que en los hombres destaca el alcohol y la cocaína.
ATENCIÓN A FAMILIARES
El documento recoge que las entidades participantes atendieron a 6.074 familiares en 2024, y en dos de cada tres casos se trataba de mujeres, principalmente madres. Pámpanas ha resaltado que este es el único apartado de todo el informe en el que predominan las mujeres, lo que pone en evidencia que ellas mantienen el rol de cuidadora en la familia. Aun así, ha puntualizado que va habiendo algunos cambios y son cada vez más padres los que se acercan a pedir información.
Sobre otros servicios que presta UNAD, el informe registra 6.008 atenciones en los servicios de orientación y empleo, de las cuales el 72 por ciento fueron a hombres y el 28 por ciento a mujeres. También apunta 3.163 atenciones por parte de los servicios jurídicos, el 84 por ciento a hombres, siendo lo más común que requieran asistencia por causas pendientes o en tramitación. Los delitos más comunes son los robos o hurtos y los delitos contra la salud pública.
Un total de 7.597 personas, solo una de cada cuatro eran mujeres, acudieron a la red de atención por reducción de daños, un servicios que se presta en los casos en que la intervención terapéutica no ha producido un resultado o este no se ha consolidado.
Entre los servicios más utilizados, destacan tanto en hombres como en mujeres los programas de atención a personas sin hogar, que demandan el 48 por ciento de hombres y el 31 por ciento de mujeres. Tras este, ellas reclaman con más frecuencia los relacionados con situación de prostitución y de atención específica en VIH/sida (ambos con el 24%), y ellos los dirigidos a la atención en VIH/sida (27%) y los de atención específica de 'chemsex' (13%).
SERVICIOS DE PREVENCIÓN
Durante la presentación del informe, la coordinadora de la Comisión de Prevención de UNAD, Eider Hormoatxea, ha puesto el foco en el trabajo que realiza la red para evitar la adicción. En este servicio, la participación ha sido equilibrada entre hombres y mujeres, destacando como década vital más representada la que va desde los 20 a los 30 años y como personas destinatarias la población general y los jóvenes.
"La intervención temprana y la detección precoz son claves para evitar que los consumos de drogas o los comportamientos de riesgo se conviertan en adicciones", ha subrayado Hormoatxea.
Al hilo, ha comentado cuáles son los retos históricos en el ámbito de la prevención, entre los que ha señalado la financiación inestable y dependiente de subvenciones y licitaciones públicas, y un desarrollo territorial desigual con comunidades autónomas y municipios con diferentes niveles de cobertura y capacidad técnica.
Junto a estas, se ha referido a la necesidad de evaluar programas y obtener una mayor evidencia científica para garantizar la efectividad y aprender de las intervenciones, y ha añadido que la prevención se dispersa entre "tantos" ámbitos, sanitario, social, sociosanitario, educativo, juvenil, laboral, lo que deja en una situación de vulnerabilidad a la propia estrategia preventiva y a la detección precoz.
"Para que la prevención funcione no basta con reconocer su valor, necesitamos que se garantice su presencia, que se le dé continuidad y que se le dé la seguridad", ha aseverado para finalizar reclamando recursos económicos estables, equipos profesionales formados y un compromiso político firme que sitúe la prevención en el centro de las políticas públicas.