La microbiota intestinal podría modular el desarrollo cerebral y el comportamiento

Actualizado: martes, 5 febrero 2013 12:17

MADRID, 5 Feb. (EUROPA PRESS) -

La microbiota o micromedioambiente intestinal, integrado por comunidades microbianas que colonizan el intestino humano, podría modular el desarrollo cerebral y el comportamiento, lo que abre una nueva vía en la posible utilización de probióticos con efectos beneficiosos para la salud, a través de su acción sobre los circuitos neuronales.

Así se desprende de estudios presentados en el IV Workshop sobre Probióticos, Prebióticos y Salud por la investigadora Viorica Braniste, del Departamento de Microbiología, Cáncer y Biología Celular Instituto Karolinska de Estocolmo (Suecia).

Según esta experta, las investigaciones básicas que han llevado a cabo revelan que la colonización por parte de la microbiota intestinal afecta al desarrollo cerebral de los mamíferos y su comportamiento durante la etapa adulta.

A través de mediciones de la actividad motora y del comportamiento relacionado con la ansiedad, este grupo sueco ha demostrado en ratones que el proceso de colonización microbiana desencadena unos mecanismos de señalización que afectan a los circuitos neuronales implicados en el control motor y de la ansiedad.

El trabajo presentado respalda también la teoría de que en las primeras etapas de la vida existe un período en el que la microbiota intestinal puede afectar al cerebro y al comportamiento en la vida adulta.

Entre los mecanismos que podrían mediar en la comunicación entre intestino y cerebro, Braniste, ha destacado los circuitos neuronales establecidos. En este sentido, ha dicho que la microbiota intestinal puede provocar señales a través del nervio vago hacia el cerebro y viceversa.

La modulación de transmisores, como la serotonina, melatonina, ácido gamma-aminobutírico, histaminas y acetilcolina, en el intestino es otro posible mecanismo de acción que podría mediar los efectos de la microbiota intestinal.

Asimismo, la investigadora ha avanzado que es posible que la microbiota intestinal sea capaz de modificar la expresión de algunos genes de riesgo o que forme parte de mecanismos que alteran las funciones cognitivas observadas en pacientes con enfermedades gastrointestinales.

Los cambios conductuales observados e impuestos por la presencia de la flora intestinal observados en esta investigación pueden tener mayores implicaciones si tienen en consideración las alteraciones psiquiátricas en seres humanos, ha destacado Braniste.