La medicina alternativa complementaria supone un riesgo de abandono de la medicación habitual en problemas digestivos

Actualizado: martes, 26 julio 2011 12:33

SEVILLA 26 Jul. (EUROPA PRESS) -

La utilización de medicinas alternativas complementarias (MAC) en pacientes que padecen enfermedad inflamatoria intestinal es frecuente, según sostiene un estudio elaborado por investigadores del Servicio de Gastroenterología del Hospital Clínico de Santiago de Compostela, en el que, no obstante, se revela que "en la mayoría de los casos" su uso "no supuso ningún beneficio percibido por los pacientes".

Este trabajo, al que ha tenido acceso Europa Press y que se ha presentado recientemente en Sevilla en el marco de la 'Semana de las Enfermedades Digestivas', advierte inclusive de que también "en la mayoría de los casos" de enfermos que soportan manifestaciones extraintestinales y enfermedad de larga evolución, el uso de estas medicinas alternativas complementarias conlleva "un riesgo por abandono de la medicación habitual".

En concreto, el objetivo de este estudio era conocer el impacto en la salud de estas personas tras la utilización de este tipo de tratamientos alternativos, tras constatar que los pacientes con enfermedades crónicas tienden a hacer uso en algún momento de su evolución de medicinas alternativas complementarias, siendo su "frecuencia e impacto clínico" en este paciente "desconocido" hasta el momento.

Otro de los propósitos de la misma investigación era conocer los factores que predisponen a su uso y, como objetivo secundario, valorar el "efecto subjetivo" que tiene para el enfermo el uso de estas terapias alternativas y el "impacto" sobre el cumplimiento del tratamiento habitual.

Para conocer todas estas variables, los autores de este trabajo prospectivo, descriptivo y transversal reclutaron a 705 pacientes, con una rango de edad de entre 18 y 86 años (la edad media era de 43 años) diagnosticados con enfermedad de crohn o colitis ulcerosa y clasificados en función de características sociodemográficas (edad, sexo y medio) y clínicas (cirugía previas, ingresos, manifestaciones extrintestinales o necesidad de fármacos inmunosupresores o biológicos, entre otros).

Con tal fin, se les pasó un cuestionario sobre la utilización que hacen de las medicinas alternativas complementarias, el cual incluía tipo, respuesta clínica subjetiva y si su uso se había asociado a abandono de la medicación habitual.

RESULTADOS

Entre los principales resultados se encuentran el que el 23 por ciento de esos 705 pacientes manifestaron haber utilizado alguna vez este tipo de productos, ya sea de herbolario, homeopáticos, de acupuntura, kéfir, aloe vera y curandero.

La sensación subjetiva de las medicinas alternativas complementarias fue de "no mejoría" o "empeoramiento de su enfermedad" en el 74 por ciento de estos pacientes. Además, el 11 por ciento manifestó que abandonó su medicación habitual mientras usaba los medicinas alternativas complementarias. Junto a ello, 11 enfermos refirieron algún efecto secundario de estas terapias.

A la vista de estos datos, los autores de este estudio sostienen que el uso de medicinas alternativas complementarias en pacientes con enfermedad inflamatoria intestinal "es frecuente, sobre todo, en pacientes con manifestaciones extraintestinales y enfermedad de larga evolución". Además, advierte de que, "en la mayoría de los casos, su utilización no supuso ningún beneficio percibido por los pacientes, pero sí un riesgo por abandono de la medicación habitual".