MADRID, 16 Jul. (EUROPA PRESS) -
La reactivación de un programa embrionario de movimiento celular en una persona adulta está relacionada con la diseminación del cáncer, según ha asegurado la profesora del Instituto de Neurociencias (CSIC-UMH) - Centro mixto del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, la doctora Ángela Nieto, en la investigación que la ha convertido en ganadora del premio Fundación Lilly de Investigación Biomédica Preclínica 2018, otorgado este lunes.
El mecanismo, llamado transición epitelio-mesénquima, permite a las células que nacen lejos de su destino en el embrión desplazarse hasta el lugar que corresponde y formar órganos y tejidos.
La doctora Nieto emplaza a imaginar el mecanismo como un interruptor "que debe encenderse para un correcto desarrollo embrionario y que se apaga cuando este proceso finaliza". Sin embargo, y aunque deben permanecer apagados, "en algunas personas ya adultas se encienden", ha añadido.
El hallazgo se produjo cuando la doctora Nieto investigaba la transición epitelio-mesénquima defectuosa. "Si el mecanismo se bloquea, las células quedan retenidas y no llegan a su destino", ha explicado.
Así, a nivel de comportamiento celular, "el movimiento de desprendimiento de células para llegar a otro sitio nos recordaba a lo que ocurre con el cáncer" y en esta línea decidió orientar la profesora del Instituto de Neurociencias su investigación.
Con el cáncer, "aparece un tumor primario y de ese tumor se desprenden células que se diseminan por todo el cuerpo, bien por el torrente sanguíneo o por el linfático, y llegan a otro órgano, que colonizan para hacer otro tumor". La metástasis es la causa de más del 90 por ciento de las muertes asociadas al cáncer.
"Lo que es bueno para el embrión", porque el movimiento celular es el que permite que los órganos se desarrollen donde deben, "es malo para el adulto", ha resumido la científica, que ha especificado que su investigación posibilita que "los genes embrionarios se conviertan en dianas terapéuticas".
EL PROGRAMA EMBRIONARIO, "NECESARIO Y SUFICIENTE" PARA QUE HAYA FIBROSIS
Por otro lado, la investigación de la doctora Nieto arroja que la reactivación del programa embrionario de movimiento celular es "necesaria y suficiente" para que la persona que lo experimenta padezca fibrosis orgánica. "Lo hemos extendido también a otras enfermedades, como la degeneración de los órganos, entendida como un deterioro de su funcionamiento normal", ha añadido la investigadora.
"Hemos detectado de nuevo la reactivación de las céululas embrionarias que deberían estar apagadas, y se producen por factores genéticos o por modificaciones debidas al ambiente", ha explicado. Cuando esto ocurre, estas células dejan de funcionar como células adultas y, además, "emiten señales que convierten a las células de su entorno en productoras de fibras de colágeno, lo que caracteriza fundamentalmente a las fibrosis".
Ha matizado que la investigación se refiere fundamentalmente a la fibrosis renal, pero cree que "el concepto puede extrapolarse a otras fibrosis, como la de pulmón, hígado o corazón".
"Hemos detectado que si prevenimos la reactivación del programa o si en un riñón fibrótico bloqueamos los mecanismos que comienzan este proceso, podemos atenuar la enfermedad de una forma muy significativa", ha completado la doctora Nieto.
"Tanto el cáncer como las enfermedades degenerativas son muy complejas y variadas. El cáncer no es sólo una enfermedad, son cientos de ellas y la degeneración de órganos puede producirse por razones muy diversas. Sin embargo, todas ellas tienen en común aspectos de la biología cde las células como la transición epitelio-mesénquima, que debemos seguir estudiando para diseñar mejores terapias", ha concluido la doctora Nieto.