MADRID, 23 Ene. (EUROPA PRESS) -
La enuresis afecta al 5,1 por ciento de niños entre 5 y 13 años, de los que 150.000 no tienen diagnóstico ni tratamiento, según estimar los expertos.
"Los pediatras deberíamos ser más activos identificando los niños que tienen enuresis y mucho más activos en la intervención. Al pediatra en general no le gusta la enuresis, porque es una enfermedad con manifestaciones aparentemente no demasiado problemáticas para el niño y la familia. Muchas veces se mantiene una actitud pasiva, pero como sabemos tiene consecuencias a veces difíciles de corregir con el tiempo", ha señalado el profesor de la Universidad de Oviedo y Pediatra del Centro Salud El Llano, Gijón, Venancio Martínez.
La mayor parte de los padres creen, erróneamente, que el hecho de que su hijo se orine en la cama pasados los 5 años no es un problema importante y que con el tiempo pasará, que es un tema de madurez, y no lo consideran enfermedad, menos aún si en la familia existen casos de enuresis.
En este sentido, Mapi Rodríguez, madre de dos niños enuréticos de 8 y 6 años ha señalado que "el pediatra que les corresponde a mis hijos en ningún momento me habló de tratamiento ni de una opción para que mi hijo o la familia llevara mejor el problema, fue una amiga pediatra quien me habló de que había tratamiento".
ENFERMEDAD CON SOLUCIÓN Y TRATAMIENTO
Si los padres entienden que es un problema de salud de su hijo y están dispuestos a afrontarlo y a dejarse orientar por el pediatra, "tendríamos un paso enorme para la resolución del problema y para disminuir los problemas concomitantes que lleva la enuresis en sí. Es un problema que está presente y debe abordarse y tratarse porque tiene solución y se puede curar en la inmensa mayoría de los casos", ha indicado el doctor.
Existen distintos tratamiento para esta enfermedad, como la terapia motivacional, los consejos o el entrenamiento vesical. Además, la terapia conductual con dispositivos de alarma y tratamientos farmacológicos.
Según ha afirmado el especialista, "el uso de la desmopresina es el que más está estudiado y el que resuelve en un porcentaje más alto de niños la enuresis. Es el tratamiento preferido por los pediatras por comodidad, porque lo prefieren los padres y también porque los niños lo aceptan muy bien y tiene una tasa de resolución de la enfermedad equiparable a la alarma, y con menos inconvenientes de los que pueda tener la alarma en cuanto a aceptación por parte de la familia y del niño".
La enuresis a partir de los 5 años tiene una tasa de curación alta pero los estudios dicen que si se interviene los niños se dejan de orinar antes y las complicaciones de todo tipo que entraña padecerla son más leves y desaparecen antes.