La mayor urbanización del planeta aumentará los mosquitos transmisores de infecciones

Mosquito Aedes aegypti hembra.
Mosquito Aedes aegypti hembra. - NOAH H. ROSE
Publicado: jueves, 30 julio 2020 7:29

   MADRID, 30 Jul. (EUROPA PRESS) -

   Para predecir y ayudar a controlar la propagación de infecciones transmitidas por mosquitos es importante saber dónde y por qué, evolutivamente hablando, ciertos mosquitos tienen su gusto por picar a los humanos en primer lugar. Ahora, los investigadores han identificado dos factores principales: un clima seco y la vida en la ciudad.

   A partir de estos hallazgos, predicen que una mayor urbanización en las próximas décadas significará aún más mosquitos picadores de humanos en el futuro, según el estudio que publican en la revista 'Current Biology'.

   De unas 3.500 especies de mosquitos en todo el mundo, solo unas pocas se han especializado en picar a las personas, convirtiéndose en propagadores importantes de enfermedades infecciosas.

   "Los mosquitos 'Aedes aegypti' son invasivos en los trópicos mundiales, donde una fuerte preferencia por los huéspedes y hábitats humanos los convierte en vectores de enfermedades importantes --dice Carolyn McBride, de la Universidad de Princeton--. Descubrimos que en su área de distribución nativa del África subsahariana, muestran una atracción extremadamente variable hacia los huéspedes humanos, que van desde una fuerte preferencia por los humanos hasta una fuerte preferencia por los animales no humanos".

   "Los mosquitos que viven cerca de densas poblaciones humanas en ciudades como Kumasi, Ghana u Uagadugú, en Burkina Faso, mostraron una mayor disposición a morder huéspedes humanos", agrega Noah Rose, también de Princeton.

   "Pero solo desarrollan una fuerte preferencia por los huéspedes humanos en lugares con estaciones secas intensas, en particular, en la región del Sahel, donde la lluvia se concentra en solo un par de meses al año --añade--. Creemos que esto se debe a los mosquitos en estos climas son especialmente dependientes de los humanos y del almacenamiento de agua humana para su ciclo de vida".

   Las personas tienden a pensar en todos los mosquitos como plagas importantes para las personas. Pero, de hecho, explican los investigadores, los mosquitos son bastante diversos. Algunos de ellos no morderán a los humanos en absoluto. Solo unas pocas especies se especializan en morder personas. En el nuevo estudio, los investigadores centraron su atención en 'Aedes aegypti', el principal propagador del dengue, el zika, la fiebre amarilla y el virus Chikungunya.

   "Muchas personas han especulado sobre por qué esta especie evolucionó para morder selectivamente a los humanos, pero nuestro estudio es el primero en abordar esta pregunta directamente con datos empíricos sistemáticos", apunta McBride.

   Para hacer esto, los investigadores aprovecharon el hecho de que esta especie provenía de África y que a muchas poblaciones de África todavía no les gusta morder a los humanos. Hicieron una pregunta simple: ¿dónde específicamente les gustan los mosquitos a los humanos? ¿Y dónde prefieren morder a otros animales?

   Los investigadores utilizaron trampas especiales para recoger huevos de 'Ae. aegypti' de múltiples lugares al aire libre en cada uno de los 27 lugares en África subsahariana. De vuelta en el laboratorio, probaron las preferencias de cada una de esas poblaciones de mosquitos para el aroma de las personas frente a otros animales, incluidos los conejillos de indias y las codornices.

   Sus estudios condujeron a dos hallazgos principales. Primero, muestran que los mosquitos que viven en ciudades urbanas densas se sentían más atraídos por las personas que los de lugares más rurales o salvajes.

   Sin embargo, los investigadores señalan que esto solo se aplica a ciudades modernas especialmente densas y, por lo tanto, no es probable que sea la razón original de que cierta población de 'Ae.' Los mosquitos 'aegypti' evolucionaron para especializarse en picar humanos.

   Su segundo descubrimiento fue que los mosquitos que viven en lugares con estaciones secas más largas y cálidas mostraron una fuerte preferencia por un olor humano frente a un animal.

   "Me sorprendió que el hábitat inmediato no tuviera mucho efecto: los mosquitos en los bosques y las ciudades cercanas tenían un comportamiento similar --señala Rose--. Pensamos que tal vez mudarse a paisajes humanos sería un factor clave de atracción para los huéspedes humanos. Pero parece que los mosquitos vuelan demasiado rápido entre estos hábitats para que su comportamiento diverja en muchos casos".

   "Cuando tomamos una visión más regional de las cosas, vimos que las regiones con densas poblaciones humanas tenían mosquitos con una mayor atracción por los hospedadores humanos, pero esto no dependía del hábitat preciso en el que los recolectamos dentro de cada región", continúa Rose.

   "También me sorprendió que el clima fuera más importante que la urbanización para explicar la variación de comportamiento actual --añade--. Muchos mosquitos que viven en ciudades bastante densas no prefieren particularmente picar a los huéspedes humanos".

   "Creo que será sorprendente para las personas que en muchas ciudades de África, esta especie discrimina activamente contra los humanos --apunta McBride--. Solo cuando las ciudades se vuelven extremadamente densas o se ubican en lugares con estaciones secas más intensas, se interesan más en morder a los humanos".

   Los investigadores muestran que muchos genes concentrados en algunas partes clave del genoma impulsaron este cambio evolutivo en las preferencias de picadura de los mosquitos.

   A partir de sus hallazgos, los investigadores se preguntaron cómo se espera que el cambio climático a corto plazo y el crecimiento urbano moldeen el comportamiento de los mosquitos en el futuro cercano. Y no son buenas noticias.

   Los investigadores dicen que no se espera que el cambio climático en las próximas décadas genere cambios importantes en la dinámica de la estación seca que encontraron importante para los mosquitos. Pero, dicen, la rápida urbanización podría empujar a más mosquitos a picar a los humanos en muchas ciudades del África subsahariana en los próximos 30 años.

   Los investigadores continuarán estudiando la interacción entre las preferencias de picadura de mosquitos, el clima y la vida urbana. También les gustaría entender por qué los mosquitos se especializan en ciertos huéspedes para empezar y qué genes específicos y cambios genéticos son más importantes.