MADRID, 4 Abr. (EUROPA PRESS) -
Los óvulos femeninos expuestos al THC, el ingrediente psicoactivo de la marihuana, tienen una capacidad disminuida de producir embriones viables, y es significativamente menos probable que resulten en un embarazo viable, según un estudio animal que se publicará en la revista 'Journal of the Endocrine Society'.
La marihuana, o cannabis, es la droga recreativa más usada por las personas en edad reproductiva. El aumento en el uso de la marihuana ha ocurrido al mismo tiempo que los porcentajes de THC en la droga han aumentado. "En la actualidad, se aconseja a los pacientes que buscan tratamientos para la infertilidad que se abstengan de consumir cannabis, pero las pruebas científicas que respaldan esta afirmación son débiles", explica Megan Misner, del Departamento de Ciencias Biomédicas de la Universidad de Guelph (Canadá).
En el nuevo estudio, los investigadores trataron los óvulos femeninos con concentraciones de THC equivalentes a las dosis terapéuticas y recreativas. Fueron recolectados y madurados en cinco grupos: sin tratar, control, bajo THC, medio THC y alto THC. Se midieron las tasas de desarrollo y la expresión genética de los óvulos. Los investigadores evaluaron la capacidad de los embriones para alcanzar etapas críticas de desarrollo en puntos de tiempo específicos.
Con mayores concentraciones de THC, encontraron una disminución significativa y un retraso en la capacidad de los ovocitos tratados para alcanzar estos puntos de control. "Este es un indicador clave para determinar la calidad y el potencial de desarrollo del óvulo", detalla Misner.
La exposición al THC condujo a una disminución significativa de la expresión de los genes llamados conexinas, que están presentes en niveles elevados en los óvulos de mayor calidad. Se ha demostrado que los de menor calidad, con menores niveles de expresión de conexinas, conducen a un desarrollo embrionario más pobre. "Este embrión tendría menos probabilidades de pasar de la primera semana de desarrollo, y por lo tanto llevaría a la infertilidad", apunta Misner.
Los datos preliminares también mostraron que el THC afectaba la actividad de un total de 62 genes en los grupos de tratamiento en comparación con los grupos no tratados. "Esto implica una menor calidad y una menor capacidad de fecundación, por lo que al final la fertilidad es menor", concluye.