MADRID, 5 Nov. (EUROPA PRESS) -
Un equipo de investigadores del Centro de Tecnología Biomédica de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), en colaboración con la Universidad Complutense de Madrid (UCM), el Instituto Cajal y el Hospital Clínico San Carlos, ha logrado la recuperación funcional de ratones a los que se había inducido un infarto cerebral, gracias a la implantación de células madre encapsuladas en un biomaterial inocuo y totalmente biocompatible (la fibroína de la seda).
De hecho, esta encapsulación ha demostrado incrementar la tasa de supervivencia de las células madre implantadas en el cerebro lo que, además de influir positivamente en la reparación del tejido nervioso dañado, evita la extensión de la lesión.
En concreto, los científicos han utilizado ratones con infarto cerebral a los que se implantaron células madre de origen mesenquimal encapsuladas en un biomaterial inocuo y totalmente biocompatible: la fibroína de la seda. Tras el tratamiento, los ratones experimentaron una mejoría significativa de sus capacidades sensoriales y motoras, que habían quedado profundamente alteradas tras el infarto cerebral.
Además, mediante técnicas electrofisiológicas, los investigadores demostraron que esta mejoría funcional se acompañó de fenómenos de reorganización cerebral en áreas adyacentes a la zona de daño. Del mismo modo, los expertos observaron que la fibroína de la seda aumentó considerablemente la supervivencia de las células madre implantadas en el cerebro, impidiendo una mayor extensión del daño tras el ictus cerebral inducido en los animales.
"Estos resultados abren una vía esperanzadora para el tratamiento de los desórdenes neurológicos mediante un nuevo tipo de terapia avanzada basada en la utilización de la fibroína de la seda como vehículo de liberación de fármacos y células logrando con ello aumentar el rendimiento terapéutico y la mejoría funcional de los pacientes", ha dicho el investigador del CTB UPM, Daniel González Nieto.
Este estudio, ha sido financiado por la Comunidad de Madrid a través del proyecto 'NeuroCentro' (B2017/BMD-3760), una iniciativa para la creación de un centro tecnológico en la Comunidad de Madrid para el tratamiento integrado de los desórdenes neurológicos. El estudio también fue financiado por el Ministerio de Economía y Competitividad.
Además, otro de los participantes del estudio ha sido la empresa SILKBIOMED, una 'spin-off' de la UPM que actualmente es pionera en el desarrollo de una gran variedad de productos de medicina avanzada utilizando la fibroína de la seda como biomaterial para el tratamiento de diversos trastornos de origen neurológico además del ictus, por ejemplo en traumatismos cerebrales, lesión medular, degeneración macular, Alzheimer o Parkinson.