MADRID 21 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los linfomas o tumores originados en los tejidos linfáticos son los cánceres hematológicos cuya incidencia más ha aumentado en España en los últimos años, según ha asegurado el doctor Eduardo Ríos, jefe de Servicio de Hematología del Hospital Valme de Sevilla, que ha participado en el encuentro 'Conclusiones del 51 Congreso Anual de la Sociedad Americana de Hematología' (Post-ASH), organizado por Roche Farma, que se celebra en Madrid.
Actualmente, se estima que cada año se diagnostican entre 30 y 35 nuevos tumores hematológicos por cada 100.000 habitantes, siendo los más prevalentes tanto la leucemia linfática crónica (LHC) como todo el grupo de linfomas (que incluye los linfomas Hodgkin, los de células B y los de células T).
Sin embargo, ha explicado el doctor Ríos en declaraciones a Europa Press, se está observando un incremento de los linfomas con respecto a otros tumores hematológicos, como las leucemias, cuya incidencia se presenta "más estable".
"En parte se debe a que ahora están mejorando los diagnósticos", asegura este experto, quien no obstante achaca a este aumento de casos el progresivo aumento de la esperanza de vida, ya que "son tumores de gente mayor".
Del mismo modo, también asegura que estos tumores están "relacionados con situaciones de inmunodeficiencia", por lo que aquellos pacientes que están sometidos a un tratamiento inmunosupresor tienen más riesgo de padecer un linfoma.
Esto hace que queden expuestos a estos tumores enfermos reumáticos, con alguna enfermedad inflamatoria intestinal o pacientes que se han sometido a un trasplante y, por tanto, requieren un tratamiento inmunosupresor para evitar el rechazo.
"Aunque no se conoce totalmente el mecanismo de formación del tumor, si que hay factores de riesgo que favorecen el desarrollo de estas enfermedades", afirma Ríos, que recuerda también como con la expansión del sida ya hubo un gran incremento de los linfomas.
El problema, reconoce este experto, es que esta vinculación con la inmunosupresión hace que "este tipo de cánceres pueda detectarse en pacientes más jóvenes, pese a que la mayor incidencia se da en gente mayor".
Según recuerda el doctor Ríos, "cada tumor tiene preferencia por una edad y, por ejemplo, los linfomas Hodgkin tienen dos picos de incidencia, en gente mayor y gente muy joven".
MEJORA SU PRONÓSTICO
En cualquier caso, señala este experto, los avances terapéuticos están permitiendo que muchos de estos pacientes dispongan de más posibilidades de curación. De hecho, uno de los cánceres hematológicos con mejor pronóstico es el linfoma Hodgkin, con una tasa de curación de casi el 80 por ciento.
Parte de este éxito se debe a que "los anticuerpos monoclonales están revolucionando el tratamiento de estos tumores", ya que presentan "efectos secundarios bien tolerados por los pacientes, al tiempo que aumenta la tasa de respuesta y su supervivencia".
"El futuro es prometedor", según Ríos, "porque en pocos años podremos disponer de nuevos fármacos para tumores que ahora mismo son de más difícil control".
Igualmente, añade, el estudio "más profundo" de las vías moleculares por el que se desarrollan estos tumores ha permitido "caracterizarlos mejor" para determinar cuál es el tratamiento más adecuado.