Un libro retrata la trayectoria del doctor Manuel Díaz, un apasionado de la asistencia, la investigación y la enseñanza

Portada Del Libro 'Manuel Díaz Rubio. Humanista De La Medicina'
PLANNER MEDIA/EP
Actualizado: jueves, 12 mayo 2011 18:12

MADRID, 12 May. (EUROPA PRESS) -

El libro 'Manuel Díaz Rubio. Humanista de la Medicina', escrito por el periodista Marino Gómez Santos, retrata la trayectoria de este médico (1908-1976) "apasionado de la asistencia, la investigación y la enseñanza" que llegó a catedrático con 28 años y fue fundador de varias sociedades científicas.

"Fue uno de los últimos eslabones de oro de aquella medicina que consideraba al enfermo como un ser con sentimientos y esperanzas". Así lo ha definido el doctor Santiago Gómez-Moran en el prólogo de la obra, en cuya edición han colaborado la Fundación Mutua Madrileña y los laboratorios Merck y Roche.

El periodista Gómez Santos, que ya ha escrito otras biografías de médicos españoles eminentes, ha accedido al archivo del doctor Díaz Rubio y ha recogido el testimonio de familiares y discípulos. El resultado es un "exhaustivo" repaso a una peripecia vital que arranca en los juegos de infancia en la Plaza Mayor de Madrid hasta sus últimos años marcados por unos problemas de visión que no le impidieron, sin embargo, seguir trabajando hasta, literalmente, el último minuto de su vida.

En el libro se indica que, por su afición al dibujo, todo apuntaba a que optaría por ingresar en la Escuela de Arquitectura pero que fueron finalmente la presencia en su casa de médicos renombrados y la enfermedad crónica de su padre los aspectos clave que le orientaron hacia la carrera de medicina.

Sus años de formación universitaria le pusieron en contacto con otras grandes personalidades de la época como el profesor Juan Negrín, Severo Ochoa, Francisco Grande Covián o Carlos Jiménez Díaz. A este último, el profesor Díaz Rubio lo consideró de inmediato, en aquellos años de carrera, "una revolución, un catedrático que era un acicate para nuestras ilusiones" y siempre manifestó su orgullo por "haber sido su primer alumno interno".

Su formación al lado del doctor Jiménez Díaz fue un detonante para que Díaz Rubio se decantara por la medicina interna. Cuando el primero inició su obra magna 'Lecciones de Patología Médica' decidió incorporar de inmediato a don Manuel entre sus colaboradores. Por el libro van desfilando momentos clave de su trayectoria vital y profesional.

El libro de Marino Gómez Santos dedica un capítulo entero a describir la fascinación que el profesor Díaz Rubio sintió siempre por Cádiz, a donde volvió para tomar posesión de la cátedra de Patología y Clínica Médicas. La obra recuerda que en aquellos años la situación en la ciudad andaluza era de "tan extrema necesidad" que, para asistir al primer enfermo, el doctor Díaz Rubio tuvo que improvisar una camilla en su despacho y contar con la ayuda de su esposa como enfermera. En aquella época aumentó la familia, su prestigio como médico, sus investigaciones sobre alergias, enfermedades hepáticas, etcétera.

El profesor Díaz Rubio tuvo siete hijos, dos de ellos, Manuel y Eduardo, prestigiosos especialistas médicos en activo, ambos en el Hospital Clínico San Carlos de Madrid. En 1968, ingresó en la Real Academia Nacional de Medicina (RANM), institución que desde el año 2008 preside su hijo Manuel. Participó en la creación de la Sociedad Española de Cardiología y fue también fundador y primer presidente de la Asociación Española de Hepatología (actual Asociación Española para el Estudio del Hígado).