MADRID, 2 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno de España incluye diversas acciones que tiene que llevar a cabo el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), entre ellas la construcción de una infraestructura de laboratorios de alta contención biológica (NBS-4, según la denominación técnica, conocido también como laboratorio P4), con el fin de mejorar la investigación, vigilancia y control de las grandes amenazas para la salud pública.
Los P4 son laboratorios de la máxima seguridad en el manejo de muestras biológicas; el nivel 4 es el más alto en la escala de la bioseguridad y es necesario para manipular microorganismos que causan enfermedades infecciosas que se consideran graves amenazas para la vida y la salud pública.
Entre los agentes considerados de bioseguridad 4 están algunos virus respiratorios, así como los causantes de fiebre hemorrágicas como el virus del Ébola, que provocó la crisis en España en 2014; la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo, causada por un nairovirus detectado en garrapatas en toda la mitad sur de España, o el virus Lloviu, un nuevo filovirus detectado en murciélagos en la cornisa cantábrica.
La disponibilidad del laboratorio NBS-4, que se construirá en el Campus de Majadahonda del ISCIII, contribuirá a la mejora de las capacidades del Sistema Nacional de Salud (SNS), ya que permitirá que el Centro Nacional de Microbiología (CNM) y el conjunto de la comunidad científica cuenten con recursos necesarios para dar una respuesta eficaz ante alertas causadas por estos microorganismos. Ante la aparición de un brote de riesgo, con etiología desconocida y con alta mortalidad asociada que suponga una amenaza para la salud de la población, la disponibilidad de unas instalaciones con el nivel máximo de contención permitiría actuar con la máxima seguridad y rapidez.
Así las cosas, el proceso de construcción y puesta a punto del laboratorio de bioseguridad 4 cumplirá todos los estándares internacionales relativos a la construcción, equipamiento y funcionamiento de este tipo de infraestructuras científicas, y contará con equipos técnicos con experiencia en la construcción y gestión de instalaciones de nivel 4 de biocontención. Antes de la redacción del proyecto se dispondrá de un estudio de evaluación de riesgos, así como un estudio de impacto ambiental.
PUESTA EN FUNCIONAMIENTO EN 2025
La puesta en funcionamiento de esta nueva infraestructura está programada para 2025, una vez superados todos los requisitos exigidos a nivel nacional e internacional, lo que implicará una formación especializada por parte de diversos profesionales, que se realizará en infraestructuras europeas que forman parte de la red de European Research Infrastructure on Highly Pathogenic Agents (ERINHA). El laboratorio de bioseguridad 4 del ISCIII se ha programado contando con el conocimiento científico especializado en esta materia y la colaboración de expertos a nivel internacional.
El CNM del ISCIII dispone actualmente de un laboratorio de alto nivel de contención del tipo NBS-3, en el que se puede trabajar con la mayoría de los microrganismos causantes de posibles alertas de salud pública. Sin embargo, este laboratorio no puede realizar parte de los procedimientos necesarios para el diagnóstico de infecciones por patógenos de nivel 4. Con respecto al entorno europeo, existen en la actualidad 8 instituciones con laboratorios de capacidad NBS-4 en la Unión Europea (2 en Alemania, 1 en Reino Unido, 1 en Suecia, 1 en Suiza, 1 en Italia, 1 en Francia y 1 en Hungría).
La pandemia de COVID-19 ha modificado la perspectiva sobre amenazas biológicas e infecciosas. Por ello, para seguir mejorando su labor de referencia nacional e internacional, el CNM-ISCIII precisa de un impulso en sus capacidades diagnósticas. "España y el SNS deben contar con las instalaciones técnicas más avanzadas y profesionales con la máxima capacitación disponible para poder combatir esta amenaza, que quedarían garantizadas con este nuevo laboratorio de bioseguridad 4", concluyen desde el ISCIII.