Los investigadores refutan la idea de que el patrón humano de asimetría cerebral es único

Endocasts de humanos, chimpancés, gorilas y orangutanes.
Endocasts de humanos, chimpancés, gorilas y orangutanes. - SIMON NEUBAUER
Publicado: lunes, 17 febrero 2020 7:22

   MADRID, 17 Feb. (EUROPA PRESS) -

   Investigadores del Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva y de la Universidad de Viena han refutado la idea de que el patrón humano de asimetría cerebral es único, tras estudiar las huellas cerebrales en los huesos craneales de los grandes simios y los humanos, según publican en la revista 'Science Advances'.

   El lado izquierdo y derecho del cerebro humano están especializados para algunas habilidades cognitivas. Por ejemplo, en los humanos, el lenguaje se procesa predominantemente en el hemisferio izquierdo, y la mano derecha está controlada por la corteza motora en el hemisferio izquierdo.

   La lateralización funcional se refleja en la asimetría morfológica del cerebro. Los hemisferios izquierdo y derecho difieren sutilmente en la anatomía del cerebro, la distribución de las células nerviosas, su conectividad y neuroquímica. Las asimetrías de la forma externa del cerebro son incluso visibles en moldes de la zona interior del cráneo.

   La mayoría de los humanos tiene una combinación de un lóbulo occipital izquierdo más saliente (ubicado en la parte posterior del cerebro) con un lóbulo frontal derecho más saliente. La asimetría cerebral se interpreta comúnmente como crucial para la función y cognición del cerebro humano porque refleja la lateralización funcional.

   Sin embargo, los estudios comparativos entre primates son raros y no se sabe qué aspectos de la asimetría cerebral son realmente exclusivamente humanos. Según los datos disponibles anteriormente, los científicos asumieron que muchos aspectos de la asimetría cerebral evolucionaron solo recientemente, después de la división entre el linaje humano del linaje de nuestros parientes vivos más cercanos, los chimpancés.

Los investigadores midieron la magnitud y el patrón de asimetría de forma de endocasts (moldes del interior de los cráneos) de humanos y simios.

   "Los grandes cerebros de los simios rara vez están disponibles para el estudio, pero hemos desarrollado métodos para extraer datos de asimetría cerebral de los cráneos, que son más fáciles de acceder. Esto hizo posible nuestro estudio en primer lugar", explica el autor principal, Simon Neubauer.

   El equipo descubrió que la magnitud de la asimetría era casi la misma en humanos y en la mayoría de los grandes simios. Solo los chimpancés eran, en promedio, menos asimétricos que los humanos, los gorilas y los orangutanes.

   También investigaron el patrón de asimetría y pudieron demostrar que no solo los humanos, sino también los chimpancés, los gorilas y los orangutanes mostraron el patrón de asimetría descrito anteriormente como típicamente humano: el lóbulo occipital izquierdo, el lóbulo frontal derecho, así como el polo temporal derecho y el lóbulo cerebeloso derecho que se proyecta más relativamente a sus partes contralaterales.

   "Lo que nos sorprendió aún más --destaca Philipp Mitteroecker, coautor del estudio-- fue que los humanos fueron menos consistentes en esta asimetría con muchas variaciones individuales en torno al patrón más común".

   Los autores interpretan esto como un signo de una mayor modularización funcional y del desarrollo del cerebro humano. Por ejemplo, las proyecciones diferenciales del lóbulo occipital y el cerebelo están menos correlacionadas en humanos que en los grandes simios. Este hallazgo es interesante porque el cerebelo en humanos experimentó cambios evolutivos dramáticos y parece que su asimetría también se vio afectada.

El hallazgo de un patrón de asimetría compartida pero una mayor variabilidad en humanos es intrigante para la interpretación de la evolución del cerebro humano.

   Un endocast de uno de nuestros ancestros fósiles que muestra esta asimetría ya no se puede interpretar como evidencia de lateralización cerebral funcional específica del ser humano sin otros datos (arqueológicos).

   Philipp Gunz, coautor del estudio, explica: "Este patrón de asimetría compartida del cerebro ya evolucionó antes del origen del linaje humano. Los humanos parecen haberse basado en este patrón morfológico para establecer la lateralización cerebral funcional relacionada con los comportamientos humanos típicos".