MADRID, 9 Jul. (EUROPA PRESS) -
Investigadores del Instituto Nacional de Enfermedades Alérgicas e Infecciosas de Estados han identificado un lípido de origen natural utilizado por una bacteria causante de enfermedades para alterar la respuesta inmune del huésped y aumentar las posibilidades de infección, lo que podría abrir la puerta a una "potente" terapia contra la inflamación en enfermedades bacterianas y virales.
Se sabe que los lípidos ayudan a la bacteria 'Francisella tularensis', la causa de la tularemia, a suprimir la inflamación del huésped al infectar células de ratón y humanas. En este nuevo estudio, publicado en la revista 'Journal of Innate Immunity', los investigadores han hallado una forma de la fosfatidiletanolamina (PE) presente en la bacteria.
La composición de PE encontrada en F. tularensis difiere de la PE encontrada en otras bacterias. En experimentos de cultivo celular, los investigadores descubrieron que la forma natural y sintética de PE reducía la inflamación causada tanto por la bacteria de la tularemia como por el virus de la fiebre del dengue.
Después de identificar PE como el lípido que alteraba la respuesta inmune, los científicos comenzaron a considerar su potencial valor terapéutico. Debido a que F. tularensis natural es altamente infeccioso y, por lo tanto, es un reto trabajar con él, el grupo desarrolló lípidos sintéticos, PE2410 y PEPC2410, que serían mucho más fáciles de estudiar y producir. Después, verificaron que ambos lípidos sintéticos también suprimieron la respuesta inmune durante la infección de células de ratón y humanas en el laboratorio.
Debido a que varios tipos de infecciones virales implican una respuesta inflamatoria no restringida, el grupo probó la PE natural y sintética en el laboratorio contra las células humanas infectadas por el virus de la fiebre del dengue. Ambas versiones inhibieron la respuesta inmune en comparación con la respuesta inmune observada en células infectadas pero no tratadas.
Ahora, el grupo planea continuar explorando cómo F. tularensis afecta la respuesta inmune. Así, esperan que sus hallazgos eventualmente lleven al desarrollo de un "potente" antiinflamatorio terapéutico de amplio espectro.