MADRID, 14 Abr. (EUROPA PRESS) -
Investigadores de la Universidad de Bristol (Reino Unido) han logrado un avance que podría evitar que determinados enfermos renales avancen hacia la insuficiencia renal. Con financiación de la organización benéfica Kidney Research UK, los profesores Moin Saleem y Gavin Welsh, de la Facultad de Medicina de Bristol, y su equipo han identificado una nueva vía de tratamiento para pacientes con síndrome nefrótico no genético (idiopático), dirigida a un factor aún desconocido que provoca la progresión hacia la insuficiencia renal.
El síndrome nefrótico es una afección renal que hace que los órganos pierdan proteínas en la orina. Esto se debe a fallos en el sistema de filtración del riñón y, en algunos casos, puede llevar al paciente a desarrollar insuficiencia renal. Aunque se trata de una enfermedad poco frecuente, afecta a unas 10.000 personas al año en el Reino Unido y la mayoría de los casos están relacionados con causas no genéticas. El impacto que tiene en los pacientes, muchos de los cuales son niños, puede ser devastador.
Los científicos de Bristol sabían que podría haber uno o más factores en la sangre (sustancia que participa en una reacción biológica dentro del organismo) que provocaran el fallo de los riñones de los pacientes con síndrome nefrótico, pero hasta ahora no habían podido averiguar exactamente cuáles podían ser. Sin embargo, el equipo probó un enfoque diferente para identificar cómo funcionaba el factor e intentar evitar su activación.
Utilizando plasma sanguíneo de pacientes con síndrome nefrótico tratados con diálisis, el equipo de Bristol quería confirmar si un receptor (una sustancia molecular que provoca un efecto específico en la célula) conocido como PAR-1 funcionaba en conjunción con el factor desconocido.
El doctor May utilizó el plasma de los pacientes y, por separado, un activador de PAR-1 para investigar sus efectos en las células renales en el laboratorio. Ambos tratamientos provocaron trastornos en las células renales. Una vez confirmada la relación entre el PAR-1 y el factor desconocido, sus resultados sugieren que los medicamentos para bloquear el receptor podrían ser una opción viable.
Los esteroides son actualmente el tratamiento más eficaz para el síndrome nefrótico, pero tienen efectos secundarios desagradables y no funcionan igual de bien en todos los pacientes. Además, con el factor desconocido circulando por la sangre del paciente, un trasplante puede ofrecer cierto respiro, pero la enfermedad suele reaparecer y dañar el nuevo riñón, a veces casi instantáneamente. Este descubrimiento podría revolucionar las opciones de tratamiento de los pacientes con síndrome nefrótico y ofrece la posibilidad de erradicar el uso de esteroides y hacer del trasplante una opción más viable.
"Los investigadores han hecho muchos intentos por identificar el factor desconocido que da lugar al síndrome nefrótico, con escaso éxito. Sabíamos que uno o más factores estaban presentes en la sangre y si pudiéramos identificar cómo funciona en los enfermos renales, podríamos crear una vía clara para tratarlos y, en última instancia, frenar su progresión hacia la insuficiencia renal", ha indicado Carl May.
El uso de tratamientos anti-PAR-1 no sólo erradicaría la necesidad de esteroides, sino que también permitiría que el trasplante fuera un tratamiento más beneficioso, ya que los riñones recién trasplantados ya no serían tan susceptibles a los efectos del factor desconocido.
Si se confirma la seguridad de estos tratamientos, en los próximos años los pacientes con síndrome nefrótico podrían dejar de tomar corticoides y recibir nuevos tratamientos.