MADRID 9 Mar. (EUROPA PRESS) -
Un estudio reciente de la Universidad de Georgia (EEUU) muestra diferencias en la estructura cerebral dependiendo del nivel de confianza de las personas. Los resultados podrían tener utilidad para entender cómo estas diferencias se relacionan con los procesos sociales específicos en trastornos como el autismo.
Concretamente, los investigadores creen que la investigación podría tener implicaciones para futuros tratamientos de estos pacientes, ha señalado el autor principal del estudio, Brian Haas, profesor asistente en el departamento de psicología de la universidad. "Hay condiciones, como el autismo, que se caracterizan por un déficit en la capacidad de procesar el mundo social, una de las cuales es la capacidad de confiar en la gente", ha señalado Haas.
El estudio, publicado en la revista 'NeuroImage', muestra la evidencia de que estas regiones del cerebro son importantes para la confianza, "y si podemos entender cómo estas diferencias se relacionan con los procesos sociales específicos, entonces podemos ser capaces de desarrollar técnicas de tratamiento más específicas para las personas que tienen déficit en la cognición social", ha añadido.
Haas y su equipo de investigadores utilizaron dos medidas para determinar los niveles de confianza de 82 participantes en el estudio. Los participantes realizaron un cuestionario sobre su tendencia a confiar en los demás. También se les mostraron fotografías de rostros con expresiones faciales neutrales para evaluar qué tan confiable encontraban a cada persona en la imagen.
Los investigadores tomaron imágenes por resonancia magnética de los cerebros de los participantes para determinar la estructura del cerebro que se asocia con la tendencia a tener más confianza en los demás. Lo que encontraron los investigadores eran las diferencias en dos áreas del cerebro.
"El hallazgo más importante fue que el volumen de materia gris fue mayor en el ventral medial prefrontal, que es la región del cerebro que sirve para evaluar las recompensas sociales, en las personas que tienden a ser más confianza en los demás", ha señalado el investigador.
Otro hallazgo que se observó fue en la zona de la amígdala cerebral. "El volumen de esta área del cerebro, que codifica para la prominencia emocional, fue mayor en aquellos que eran tanto de confianza más confianza y menos de otros. Si algo es emocionalmente importante para nosotros, la amígdala nos ayuda a recordar", ha explicado.