MADRID, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -
Un descubrimiento realizado por un equipo de investigación dirigido por la Universidad Estatal de Washington (Estados Unidos) tiene el potencial de inhibir la propagación del virus del Nilo Occidental, así como el del Zika y el dengue.
En un estudio publicado en la revista 'Cell Reports', los investigadores demostraron que la insulina de mamíferos activó una vía de inmunidad antiviral en los mosquitos, aumentando la capacidad de los insectos para suprimir los virus.
Las picaduras de mosquitos son la forma más común en que los humanos se infectan con flavivirus, una familia de virus que incluye el Nilo Occidental, el dengue y el zika. En los humanos, tanto el Nilo occidental como el dengue pueden provocar enfermedades graves, incluso la muerte, mientras el zika se ha relacionado con defectos de nacimiento cuando las mujeres embarazadas están infectadas.
"Es realmente importante que tengamos algún tipo de protección contra estas enfermedades porque actualmente no tenemos ningún tratamiento. Si somos capaces de detener la infección a nivel del mosquito, entonces los humanos no contraerían el virus", señala Laura Ahlers, autora principal del estudio y reciente doctorada de la Universidad Estatal de Washington.
Trabajando primero con moscas de la fruta, que tienen respuestas inmunes similares a los mosquitos, Ahlers y sus colegas identificaron un receptor similar a la insulina en los insectos que, cuando se activa, inhibe la replicación del virus del Nilo Occidental en las moscas.
Luego, los investigadores obtuvieron esta misma respuesta en los mosquitos al alimentarlos con sangre que contenía insulina elevada. Las pruebas posteriores mostraron que la activación de este receptor también fue eficaz para suprimir el dengue y el Zika en las células de insectos.
Si bien ya se sabía que la insulina aumenta la respuesta inmune en los mosquitos, esta es la primera vez que se identifica la conexión de la insulina con una vía de respuesta inmune particular, llamada JAK / STAT. Es un paso significativo hacia el objetivo a largo plazo de crear una intervención, asegura Alan Goodman, profesor asistente de WSU y autor correspondiente del artículo.
"Si podemos activar este brazo de inmunidad a través del receptor de insulina en el mosquito, podemos reducir la carga viral general en la población de mosquitos --añade--. Si los mosquitos transportan menos virus cuando te pican, transmitirán menos virus y hay una mayor probabilidad de que no adquieras la enfermedad".