El inserto de disolución rápida resulta seguro y prometedor como método de prevención del VIH

Archivo - Micrografía electrónica de barrido de una célula T H9 infectada por el VIH.
Archivo - Micrografía electrónica de barrido de una célula T H9 infectada por el VIH. - NIAID - Archivo
Publicado: viernes, 24 febrero 2023 6:43

MADRID, 24 Feb. (EUROPA PRESS) -

Un inserto de disolución rápida que se está desarrollando como método de prevención del VIH "a demanda" resultó ser seguro y bien tolerado en el primer estudio sobre su uso por vía rectal. Los resultados, presentados en la Conferencia sobre Retrovirus e Infecciones Oportunistas (CROI 2023), también han revelado que el inserto suministra altos niveles de los fármacos antirretrovirales tenofovir alafenamida (TAF) y elvitegravir (EVG) al tejido y fluido rectal, con muy poco fármaco circulando en otras partes del organismo.

Los resultados de las pruebas de laboratorio sugieren además que el inserto podría proporcionar protección hasta tres días después de su uso.

El inserto TAF/EVG de disolución rápida, que se asemeja a un comprimido oral, se concibió originalmente como un producto para prevenir el VIH adquirido a través del sexo vaginal. El estudio de fase I, conocido como MTN-039, se diseñó para evaluar la seguridad y viabilidad del inserto como método a demanda --para utilizar en el momento de mantener relaciones sexuales o en torno a él-- en personas que practican el coito anal receptivo. Según algunas estimaciones, el riesgo de contraer el VIH a través del sexo anal es hasta 20 veces mayor que a través del sexo vaginal.

"No todo el mundo quiere tomar una pastilla todos los días o acudir a una clínica para recibir una profilaxis preexposición inyectable de acción prolongada", explica la doctora Sharon Riddler, profesora de enfermedades infecciosas de la Facultad de Medicina de la Universidad de Pittsburgh (Estados Unidos), refiriéndose a los métodos aprobados actualmente, como la profilaxis preexposición oral (PrEP) diaria y las inyecciones de cabotegravir administradas cada dos meses.

"Descubrir que el inserto era seguro y que suministraba altas concentraciones de fármaco en el recto --en el lugar de la infección potencial-- con una baja exposición sistémica, respalda su evaluación continuada como método alternativo de prevención del VIH", añade la doctora Riddler, que dirigió el estudio para la Red de Ensayos de Microbicidas (MTN).

En el MTN-039 participaron 23 personas seronegativas de la Universidad de Pittsburgh y la Universidad de Alabama, seis de las cuales eran mujeres de nacimiento. Los participantes recibieron una dosis única del inserto en la clínica, y los investigadores recogieron muestras de sangre, líquido rectal y tejido rectal para evaluar los niveles del fármaco en distintos momentos de ese día y en los tres días siguientes.

Tras un periodo de hasta siete semanas, los participantes volvieron a la clínica y se les administraron dos de los insertos al mismo tiempo y, como antes, se realizaron pruebas durante los tres días siguientes para determinar la cantidad de fármaco que entraba y permanecía en la sangre, el líquido rectal y el tejido rectal.

Sólo un acontecimiento adverso, un leve caso de eritema anal, se consideró posiblemente relacionado con el uso del inserto. Ambas dosis --la única y las dos-- alcanzaron niveles elevados de fármaco en el tejido y el líquido rectales, y mediante una prueba de laboratorio del tejido rectal que imita la forma en que el VIH infecta las células del recto, los investigadores descubrieron que ambas dosis podían suprimir el VIH durante un máximo de 72 horas, y que dos inserciones (el doble de la dosis de una) proporcionaban una mayor supresión del VIH en el tejido.

Cada inserto contiene 20 mg de TAF y 16 mg de EVG. El TAF es un inhibidor nucleotídico de la transcriptasa inversa que impide que el virus VIH se replique y haga copias de sí mismo, mientras que el EVG es un inhibidor de la integrasa que impide que el VIH se integre en el ADN de las células huésped.

Aunque el TAF también actúa contra el virus del herpes simple (VHS), las pruebas de tejido rectal realizadas en el marco del MTN-039 no se diseñaron para investigar su potencial para suprimir la infección por VHS.

"El estudio MTN-039 ha proporcionado información importante sobre la seguridad del inserto TAF/EVG utilizado por vía rectal, así como sobre su posible eficacia, lo que aumenta los datos recogidos en nuestro estudio de fase I del inserto como producto vaginal. Ambos estudios clínicos, que implicaban una única administración (rectal o vaginal), han mostrado niveles de fármaco elevados y duraderos compatibles con la protección frente al VIH.

"Estos resultados nos alientan mucho a la hora de planificar la siguiente serie de estudios de este producto prometedor y único, que creemos que llenaría un vacío en los métodos de prevención del VIH existentes", comenta Gustavo Doncel, profesor de obstetricia y ginecología en la Eastern Virginia Medical School y director científico y ejecutivo de CONRAD, que está desarrollando el inserto de disolución rápida TAF/EVG.

Junto con los estudios en animales publicados recientemente, que demuestran una gran eficacia cuando se aplica antes o después de la exposición viral, estos primeros ensayos clínicos en humanos respaldan los planes de CONRAD de probar la eficacia del inserto a demanda como microbicida de doble compartimento, vaginal y rectal, añadie Doncel.

En el marco del proyecto MATRIX, financiado por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), CONRAD también tiene previsto realizar un segundo estudio del inserto de uso vaginal, que, al igual que el MTN-039, evaluará su seguridad y dónde y cómo se asimilan los fármacos en el organismo, pero tras múltiples dosis repetidas.

Además, se realizarán pruebas de laboratorio de muestras de tejido para evaluar su actividad potencial contra el VIH y el VHS. El estudio, en el que se inscribirán 60 mujeres en tres centros de Estados Unidos, Kenia y Sudáfrica, será el primero en evaluar el inserto en mujeres africanas.