MADRID, 10 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los inhibidores de la proteasoma son muy prometedores como componentes de nuevas terapias combinadas para tratar la malaria resistente a múltiples fármacos, según una nueva investigación de la Universidad de Columbia y la Universidad de Stanford publicada en la revista 'PLOS Pathogens'.
La propagación de la malaria farmacorresistente, causada por el parásito 'Plasmodium falciparum', en todo el sudeste asiático destaca la necesidad urgente de desarrollar nuevas opciones de tratamiento con compuestos que no sean susceptibles a los mecanismos existentes de resistencia a los medicamentos antimaláricos.
Un trabajo reciente ha identificado el proteasoma de 'P. falciparum', un complejo de proteínas que degrada las proteínas innecesarias o dañadas, como un objetivo farmacológico prometedor. En el nuevo estudio, los investigadores caracterizaron la actividad antipalúdica de dos inhibidores de proteasoma selectivos de 'P. falciparum': el péptido vinil sulfonas covalentes WLL-vs (WLL) y WLW-vs (WLW).
Los inhibidores mostraron una potente actividad antipalúdica contra el parásito en su fase temprana resistentes a los medicamentos que tradicionalmente son difíciles de tratar. Además, los parásitos no adquirieron fácilmente resistencia a estos inhibidores del proteasoma, a diferencia de muchos candidatos antimaláricos avanzados.
No se observó que los parásitos sean resistentes a ambos compuestos. De hecho, la resistencia parcial a un compuesto a menudo creaba hipersensibilidad al otro. Estos datos se explicaron mediante el perfil basado en la actividad del complejo de proteasoma y el modelado molecular de sus interacciones con estos inhibidores. Los hallazgos también revelaron una potente sinergia entre estos inhibidores del proteasoma y múltiples clases de agentes antimaláricos químicamente diversas, según los autores.