MADRID, 24 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Industria Aeroespacial Israelí (IAI) ha transformado un sistema militar, usado para prevenir ataques terroristas e infiltraciones en las fronteras, para que mida de lejos signos vitales detectando pacientes con el coronavirus.
El sistema mide el pulso, el ritmo de la respiración y la temperatura de las personas gracias a un sistema con cámaras térmicas y sensores electroópticos. Las señales son transmitidas a un monitor donde un especialista en salud puede revisarlas sin exponerse a una infección.
"El radar que hemos transformado descubre movimientos ligeros, como el de una persona arrastrándose o caminando y lo situamos en fronteras y lugares estratégicos", explica Israel Lupa, vicepresidente y CPO de Elta, la subsidiaria de inteligencia de la Industria Aeroespacial Israelí.
Lupa y su equipo han afinado ese radar militar para que detecte los movimientos que produce el cuerpo humano. "El aparato transformado detecta movimientos producidos por el corazón y los pulmones, y según eso, nos permite medir el pulso y la respiración", indica. Dos indicadores de potenciales enfermos con coronavirus.
La temperatura es el tercer indicador y es medida a través de cámaras termales. El aparato es un poco más grande que un teléfono celular y para ser operado solo necesita de un técnico o técnica en medicina que pueda interpretar los parámetros fisiológicos en un cuarto separado.
Los radares están pensados para ser colocados en las entradas de diferentes centros sensibles.
"Los estamos instalando ya en hospitales en todo el país. Fuera de la sección de urgencias para que cuando lleguen los enfermos pasen por el radar antes y se evite infectar a todo el hospital", indicó el ingeniero. Se podrán colocar también en aeropuertos, escuelas y puestos fronterizos. Incluso han creado una variedad más pequeña que se puede instalar en el teléfono móvil para que, en un futuro, se pueda usar a nivel doméstico si fuera necesario.
