MADRID, 16 May. (EUROPA PRESS) -
Un nuevo estudio científico ha identificado a la taurina, que se produce naturalmente en el cuerpo y se consume a través de algunos alimentos, como un regulador clave de los cánceres mieloides como la leucemia, según aseguran investigadores de la Universidad de Rochester (Estados Unidos) en un artículo publicado en la revista 'Nature'.
Cabe recordar que la taurina es un aminoácido no esencial no solo se encuentra de forma natural en la médula ósea, sino también en el cerebro, el corazón y los músculos. Alimentos como la carne, el pescado y los huevos contienen taurina. También es un ingrediente clave en algunas bebidas energéticas y proteínas en polvo, y, según se ha observado, ha sido utilizada por pacientes con cáncer.
La investigación preclínica muestra que los científicos están un paso más cerca de encontrar nuevas formas de combatir la leucemia, uno de los cánceres de sangre más agresivos. En concreto, los investigadores del Instituto Oncológico Wilmot de la Universidad de Rochester lograron bloquear el crecimiento de la leucemia en modelos murinos y en muestras de células leucémicas humanas mediante herramientas genéticas para impedir la penetración de la taurina en las células cancerosas.
Dirigido por la doctora Jeevisha Bajaj, el equipo de investigación descubrió que la taurina es producida por un subconjunto de células normales en el microambiente de la médula ósea, el tejido dentro de los huesos donde se originan y se propagan los cánceres mieloides. Las células leucémicas no pueden producir taurina por sí mismas, por lo que dependen de un transportador de taurina (codificado por el gen SLC6A6) para extraerla del entorno de la médula ósea y transportarla a las células cancerosas.
El descubrimiento se produjo mientras los científicos estaban mapeando lo que sucede dentro de la médula ósea y su ecosistema, un enfoque de larga data entre los investigadores de Wilmot, quienes han avanzado en la ciencia en torno al microambiente con el objetivo de mejorar los tratamientos contra el cáncer de sangre.
"Estamos muy entusiasmados con estos estudios porque demuestran que dirigir la captación por parte de las células de leucemia mieloide puede ser una nueva vía posible para el tratamiento de estas enfermedades agresivas", detalla Bajaj, profesor asistente en el Departamento de Genética Biomédica.
Los investigadores también descubrieron que, a medida que las células leucémicas absorben taurina, esta promueve la glucólisis (la descomposición de la glucosa para producir energía) y así impulsar el crecimiento del cáncer. Antes de esto, según los autores, se desconocía que la taurina pudiera tener un papel promotor del cáncer.
La leucemia tiene varios subtipos y las tasas de supervivencia varían. Este estudio revela que la expresión del transportador de taurina es esencial para el crecimiento de múltiples subtipos, como la leucemia mieloide aguda (LMA), la leucemia mieloide crónica (LMC) y los síndromes mielodisplásicos (SMD), todos ellos originados a partir de células madre sanguíneas en la médula ósea. Estudios futuros investigarán las señales del microambiente que promueven la transición del SMD, precursor de la leucemia, a leucemia aguda.
Por su parte, la doctora Jane Liesveld, oncóloga de Wilmot que trata a personas con leucemia y coautora del artículo en Nature, señala que los científicos aún tienen mucho que aprender sobre cómo las células de leucemia se reprograman y obtienen energía para prosperar y resistir los tratamientos. "La reprogramación metabólica es un sello distintivo del cáncer, y estamos en las primeras etapas de la comprensión de los efectos metabólicos en las células leucémicas", añade. "Anteriormente, el enfoque se ha centrado en los cambios genéticos, pero ahora se está ampliando para comprender cómo las células leucémicas pueden manipular diversas vías metabólicas para su propia supervivencia".
En conclusión, el equipo de Wilmot afirma: "Dado que la taurina es un ingrediente común en las bebidas energéticas y a menudo se proporciona como suplemento para mitigar los efectos secundarios de la quimioterapia, nuestro trabajo sugiere que puede ser interesante considerar cuidadosamente los beneficios de la taurina suplementaria en pacientes con leucemia". Estudios futuros deberían investigar los niveles de taurina en personas con leucemia. No obstante, los datos actuales sugieren que sería útil desarrollar métodos estables y eficaces para impedir que la taurina entre en las células leucémicas.