MADRID, 6 May. (EUROPA PRESS) -
Un equipo de investigadores en la Ecole Polytechnique Fédérale de Lausanne (Suiza) ha descubierto que las activinas B y ALK7, expresadas por las células cancerosas e involucradas en una gran cantidad de funciones biológicas como la regulación del ciclo menstrual, pueden formar una 'barrera' que no solo impide a las células cancerosas formar nuevos tumores, sino también metástasis.
En un estudio publicado en la revista 'Developmental Cell', los investigadores estudiaron la vía de señalización de ALK7 en ratones con tumores neuroendocrinos pancreáticos o cáncer de mama. Encontraron que cuando el receptor es activado por la activina B, las células cancerosas mueren a través de un proceso llamado apoptosis.
Por el contrario, el bloqueo de la activación de la ALK7 permitió que las células cancerosas evadieran la muerte y metastatizaran con éxito en varios órganos, como el hígado, los pulmones y el cerebro. Y la forma en que las células cancerosas evadieron la 'barrera' de la activina B/ALK7 fue mediante la regulación a la baja de la activina B y/o la regulación a la baja de la ALK7.
"Este estudio refuerza la noción de que la apoptosis es una barrera importante de la tumorigénesis, y que su evasión por parte de las células cancerosas es una capacidad clave de las células cancerosas durante la malignidad y la metástasis", explican los científicos.
Además, este estudio también reveló que la presencia de ALK7 se correlacionó con una supervivencia prolongada sin recaída de pacientes con varios tipos de cáncer, incluyendo el cáncer de mama. En particular, los niveles comparativamente más altos de expresión de ALK7 también se asociaron con un período más largo antes de que la metástasis se hiciera evidente en pacientes con cáncer de mama.