MADRID, 5 Oct. (EUROPA PRESS) -
Un equipo de investigación de la Universidad Técnica de Múnich (Alemania) ha descubierto una proteína provoca un riesgo significativamente mayor de progresión del cáncer grave en los hombres.
Según el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos, la tasa de mortalidad por cáncer es de 189,5 por 100.000 en el caso de los hombres, pero solo de 135,7 por 100.000 en el de las mujeres. Amplios estudios epidemiológicos realizados en los últimos años han demostrado que el mayor riesgo de que los hombres sufran un cáncer más grave no se basa exclusivamente en un estilo de vida de mayor riesgo, como un mayor consumo medio de tabaco o alcohol.
En este trabajo, publicado en la revista 'Journal of Experimental Medicine', han identificado ahora la proteína TIMP1 como un factor que podría explicar esta diferencia específica por sexo y también mejorar los diagnósticos de riesgo para el curso clínico de la enfermedad.
Basándose en cohortes de pacientes de Alemania y Canadá, el equipo de investigación descubrió que los hombres cuya sangre contenía una mayor concentración de la proteína endógena TIMP1 también tenían un riesgo significativamente mayor de morir de cáncer.
Los análisis posteriores demostraron que el aumento de TIMP1 provoca una mayor metástasis en el hígado, lo que provoca la muerte en casos de cáncer de páncreas, cáncer de colon y melanoma.
"El TIMP1 no es más elevado en todos los varones, pero el descubrimiento del TIMP1 como parámetro de riesgo, que puede identificarse en la sangre, permite ahora a los clínicos identificar precisamente el grupo de hombres que presenta un mayor riesgo de desarrollar metástasis hepáticas potencialmente mortales", afirma uno de los responsables de la investigación, Achim Krüger.
Estudios anteriores ya han demostrado el contexto molecular en el que TIMP1 promueve la metástasis hepática. "En relación con nuestro descubrimiento actual, ahora hay nuevas posibilidades para la medicina personalizada con un diagnóstico optimizado y opciones de terapia dirigida", añade Krüger. Junto con su grupo de trabajo, planea seguir investigando las causas moleculares de las modificaciones específicas de los hombres en la mayor producción de TIMP1 en el organismo.