Identifican una fuente de antibióticos naturales dentro de las proteínas humanas

El equipo responsable del trabajo. - UAB

Podría abrir la puerta a tratamientos eficaces ante infecciones resistentes a antibióticos

BARCELONA, 4 Jun. (EUROPA PRESS) -

Un equipo de científicos encabezado por la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) ha identificado una nueva clase de péptidos antimicrobianos (AMP) en proteínas del cuerpo humano capaces de eliminar selectivamente bacterias resistentes, especialmente del tipo gramnegativo, responsables de infecciones hospitalarias graves.

El hallazgo, publicado en la revista 'Molecular Systems Biology', podría abrir la puerta a tratamientos más eficaces ante infecciones resistentes a antibióticos convencionales, informa la UAB en un comunicado este miércoles.

El estudio se ha centrado en un grupo de proteínas conocidas como proteínas de unión a glicosaminoglicanos (HBP), que normalmente ayudan en procesos como la coagulación de la sangre o la inflamación.

5 PÉPTIDOS CON ACTIVIDAD "POTENTE"

La investigación se basa en la observación de que ciertas proteínas del cuerpo que se unen a la heparina --molécula que regula procesos como la coagulación y la inflamación-- también pueden reconocer estructuras similares que se encuentran en la superficie de bacterias peligrosas.

A partir de esa idea, los investigadores sintetizaron fragmentos de proteínas con potencial antimicrobiano, de entre los cuales 5 péptidos mostraron una actividad "potente" frente a varias bacterias gramnegativos como 'Escherichia coli', 'Pseudomonas aeruginosa' o 'Acinetobacter abumannii', todos ellos responsables de infecciones graves en hospitales.

Uno de los péptidos, al que han llamado HBP-5, ha resultado "especialmente prometedor": no solo elimina bacterias en el laboratorio de forma eficaz, incluso en concentraciones muy pequeñas, sino que también actúa en un modelo de sepsia en ratones infectados, en el que el tratamiento ha conseguido reducir la carga bacteriana en varios órganos de forma significativa.

"Esto abre la puerta a una nueva familia de antibióticos derivados de proteínas propias del cuerpo, con la ventaja que pueden actuar específicamente contra bacterias resistentes sin afectar las células sanas", concluye el coordinador del trabajo e investigador de la UAB, Marc Torrent.