MADRID, 21 Oct. (EDIZIONES) -
Cada año se registran más de 4,7 millones de ingresos hospitalarios, siendo la media de hospitalización los 6 días. Tanto si se es un paciente, como un amigo o un familiar, la experiencia de visitar un hospital a menudo provoca estrés y ansiedad, sin contar que la enfermedad genera sentimientos de vulnerabilidad y soledad.
En los últimos años se está imponiendo, en centros de salud y en algunas plantas de especialidades como Pediatría o Oncología, diseños optimistas que puedan contribuir positivamente al proceso de curación. No cabe duda de que la arquitectura no sana pero una actitud positiva ayudar a sobrellevar la enfermedad.
A principios del siglo 20, los arquitectos vanguardistas usaron la luz natural y la ventilación para ayudar a tratar a los enfermos con enfermedades respiratorias como la tuberculosis. Además, decidieron empezar a diseñar edificios con áreas verdes y espacios al aire libre. Ahora se buscan espacios, formas y colores que contribuyan a mejorar la situación del paciente.
"La experiencia del paciente es tan importante como la atención clínica que reciben. Los médicos están ahí para administrar el medicamento, pero como arquitectos podemos ayudar a asegurar que el foco permanece en el paciente, en lugar de la enfermedad, señala el arquitecto Luis Vidal, quien trabaja en proyectos de hospitales "arquitectónicamente curativos".
En su opinión, los hospitales son los "candidatos perfectos" para demostrar que se puede mejorar la experiencia del usuario. Para conseguirlo, desde Luis Vidal+ Arquitectos explican diez claves que pueden hacer que un hospital pueda mejorar la experiencia del paciente:
1.- Al maximizar la luz del sol, la elección cuidadosa de los colores y el diseño de estructuras siguiendo una escala reconfortante y humana, "podemos garantizar que los pacientes que se quedan en el hospital se sienten como en casa. Los hospitales ya son bastante aterradores de por sí. ¿Por qué permitir que el tamaño y el diseño magnifican la ansiedad del paciente?".
2.- Una señalización clara y directa puede ayudar a los pacientes, médicos y resto de trabajadores sanitarios encontrar su camino de forma intuitiva, evitando rutas largas y complicadas, En definitiva, evitando viajes innecesarios. Al igual que le sucede a la gente, los edificios "sanos" necesitan circulación "sana". La fluidez de la circulación no sólo calma sino que puede salvar vidas.
3.- La meticulosa atención al detalle puede ayudar a los hospitales a ser percibidos como un refugio para los pacientes. La acústica debe ser calmante y los grandes edificios deben poder descomponerse en partes más pequeñas y accesibles. De esta manera, tanto el hospital como sus instalaciones se integrarán mejor en su entorno.
4.- Los jardines terapéuticos se utilizan para mejorar la calidad de los espacios interiores y exteriores, lo que reduce el estrés y tiene un beneficio directo en la recuperación del paciente. Además, los materiales sostenibles y las estrategias de energía renovable son protagonistas en nuestro enfoque medioambientalmente responsable.
5.- Los hospitales son edificios sujetos a cambios constantes, por lo que necesitan ser capaces de responder rápida y eficazmente a las demandas cambiantes, tanto desde el mundo de la sanidad como del de los propios pacientes. Diseños flexibles capaces de adelantarse a las necesidades futuras aseguran que los hospitales del presente estén construidos para durar.
6.- La arquitectura puede ayudar a lograr un equilibrio entre lo tecnológico y lo físico. Por un lado, las técnicas de cuidado de la salud son cada vez más avanzadas e innovadoras. Por otro lado, un cambio en la relación médico - paciente significa que los pacientes tienen ahora más poder que nunca. Los hospitales deben proporcionar una infraestructura que promueva la colaboración entre la tecnología, los médicos y los pacientes.
7.- Ya sea como paciente interno o externo/ambulatorio, todos los usuarios de los hospitales necesitan sentirse seguros de que están en buenas manos. La arquitectura puede ayudar a garantizar un ambiente óptimo para la recuperación del paciente: temperatura, iluminación, calidad del aire y todos los materiales que puedan inspirar refugio y seguridad.
8.- Los hospitales se enfrentan a enormes demandas económicas de s recursos y capacidades. Los fondos públicos están a menudo en juego, por lo que es aún más importante que los proyectos sean entregados a tiempo y dentro del presupuesto.
9.- Diseños modulares flexibles pueden reducir costes y plazos, mientras que las estrategias favorables al medio ambiente pueden ayudar a que los hospitales sigan siendo sostenibles y autosuficientes a largo plazo.
10.- Los pacientes y sus visitantes no son los únicos usuarios de un edificio hospitalario. Se necesita una gran fuerza de trabajo para hacer que un hospital funcione sin problemas. Como arquitectos tenemos que respetar las diversas necesidades de los empleados que utilizan el edificio todos los días. La reducción de las distancias a pie y la creación de vías claras son sólo algunas de las maneras en que esto se puede lograr.