MADRID 23 Jun. (EUROPA PRESS) -
Un trabajo de investigadores de Francia, Alemania y Corea del Sur ha relacionado la hormona conocida como GDF15 (factor de crecimiento y diferenciación 15), involucrada en la obesidad, con el riesgo de desarrollar una sepsis, una enfermedad potencialmente mortal, que se deriva de una respuesta desregulada del organismo a una infección, que conduce a un mal funcionamiento de un órgano.
El trabajo, que fue publicado recientemente en la revista científica 'PNAS', ha descubierto un efecto crítico de GDF15 sobre la infección, "que es relevante porque esta hormona aumenta en muchas enfermedades comunes, como la obesidad, las enfermedades pulmonares y cardiovasculares" ha señalado Luis Moita del Instituto Gulbenkian de Cincia (IGC).
Los investigadores midieron los niveles de GDF15 en muestras de sangre de pacientes con sepsis, en tratamiento en unidades de cuidados intensivos, y compararon estos niveles con los de individuos sanos y de pacientes diagnosticados con apendicitis. Los resultados han demostrado que los pacientes con sepsis habían aumentado los niveles de GDF15 en comparación con los otros grupos, y que los altos niveles de la hormona estaban correlacionados con la mortalidad.
La investigación continuó con el estudio en ratones que no tenían el gen GDF15. Los resultados obtenidos revelaron que los ratones sobrevivieron mejor a una infección bacteriana abdominal que se asemeja a la sepsis en pacientes humanos, lo que sugiere que la hormona juega un papel en la sepsis. Posteriormente, los investigadores estudiaron qué estaba causando el aumento de la tasa de supervivencia en ratones que no tenían GDF15. Señalaron que estos ratones pudieron reclutar sustancialmente más glóbulos blancos para el abdomen, especialmente neutrófilos, controlando mejor localmente la infección y evitando que se propague rápidamente al resto del cuerpo.
"En un momento en que muchas compañías y grupos farmacéuticos están considerando usar GDF15 como terapia complementaria para la obesidad, es importante tener en cuenta que esta estrategia terapéutica podría aumentar el riesgo de infección grave, incluida la sepsis", advierte Moita.
Con respecto a los resultados de este trabajo de investigación, el investigador de IGC dice que "aumentan la posibilidad de que la inhibición de la acción de GDF15, tal vez usando un anticuerpo monoclonal bloqueante, pueda funcionar como una nueva terapia complementaria para la sepsis, ayudando a controlar infecciones locales graves y previniéndola volverse sistémico y potencialmente mortal".