Los hematíes excretados en la orina permiten diagnosticar y clasificar las enfermedades urológicas y nefrológicas

Actualizado: miércoles, 5 octubre 2011 13:55

MADRID 5 Oct. (EUROPA PRESS) -

La Sociedad Española de Biología Clínica y Patología Molecular (SEQC) asegura que las anomalías morfológicas de los hematíes excretados en la orina pueden servir para diagnosticar y clasificar enfermedades urológicas y nefrológicas.

Así lo han destacado en el marco del seminario 'Distinción de los hematíes de origen glomerular: ¿una quimera o una herramienta útil de diagnóstico clínico?', patrocinado por la Fundación José Luis Castaño para el desarrollo de la Bioquímica Clínica.

Según advierten, el estudio del sedimento urinario es una fuente de información muy importante en la valoración de la lesión renal y más cuando alrededor del 20 por ciento de la población general sufre afecciones en el aparato urinario.

Además, aunque actualmente existen varias pruebas diagnósticas de estas patologías, el doctor Fernando Calet, miembro de la SEQC, reconoce que casi todas, excepto la ecografía y la orina son pruebas invasivas, es decir, "se atenta contra la integridad del paciente y siempre existe un cierto riesgo".

Este motivo y otros como la seguridad, su fácil obtención y su bajísimo coste llevan a los expertos a recomendar las pruebas de orina como herramienta de diagnóstico clínico, sobre porque en ella se puede analizar la hematuria o pérdida de sangre por la orina, un signo que alerta inmediatamente no sólo al clínico sino también al enfermo, el cual acude presuroso a la consulta del médico.

Actualmente, el laboratorio clínico es el que dispone de un método que investiga las anomalías morfológicas de los hematíes y según el resultado se clasifica la hematuria en isomórfica o dismórfica.

"La hematuria isomórfica procede del vertido directo de los capilares sanguíneos al torrente urinario, tal y como se produce en las enfermedades urológicas, así que puede derivarse el enfermo al urólogo", afirma Dalet.

Por el contrario, añade el experto, la hematuria dismórfica proviene de la filtración a través de la unidad nefrónica e indica una lesión del glomérulo. Esto significa que este tipo de hematurias estarán presentes, exclusivamente, en las enfermedades de origen nefrológico propias del riñón, o bien, en aquellas de carácter sistémico con repercusión en el riñón como la hipertensión, la diabetes, gota o dislipemias, entre otras.