MADRID, 27 Dic. (EUROPA PRESS) -
El uso del casco en los deportes de nieve puede reducir hasta un 60 por ciento las lesiones y traumatismos graves en la cabeza en caso de sufrir una caída o un golpe, según ha asegurado el especialista en Cirugía Artroscópica del Hospital Universitario HM Torrelodones (Madrid) y traumatólogo de la Real Federación Española de Deportes de Invierno, Diego García-Germán.
Ahora bien, el experto ha destacado la importancia de revisar el material que se vaya a utilizar antes de que comience la temporada, puesto que, por ejemplo, unos esquís en buenas condiciones con un reglaje adecuado de las fijaciones o unas botas "correctamente" abrochadas disminuirán el riesgo de lesiones.
Además, prosigue, las rodilleras articuladas han demostrado su utilidad para disminuir los episodios de fallo y podrían desempeñar un papel fundamental en la prevención de recaídas en pacientes que han padecido una lesión previa del ligamento cruzado anterior.
Cuando se practica esquí es más frecuente que se produzcan lesiones de las extremidades inferiores, concretamente en la rodilla y, de forma más precisa, en el ligamento cruzado anterior. Por su parte, entre los aficionados al 'snowboard' resulta más habitual dañarse la muñeca, la clavícula o el hombro.
"En ambos casos la preparación física y técnica previa del deportista es esencial. Es frecuente que, tras meses de inactividad, queramos esquiar una semana a tope, y esto aumenta mucho el riesgo de lesionarse", ha explicado el doctor.
A la hora de practicar deportes de invierno, García-Germán ha subrayado la importancia de realizar un calentamiento de al menos 10 minutos de duración antes de iniciar la actividad, preferiblemente antes de ponerse las botas, para incluir también los tobillos y los gemelos.
Del mismo modo, ha recomendado movilizar el tronco y extremidades inferiores y repetir los estiramientos al concluir la sesión. "Hay que mantener un adecuado nivel de hidratación, hacer descansos y comer algo, como en cualquier otro deporte. No hay que olvidar que la fatiga incrementa el riesgo de lesiones", ha añadido.
Finalmente, el especialista del Hospital Universitario HM Torrelodones ha recordado que en la nieve la exposición solar es mayor, por lo que resulta conveniente utilizar protección solar factor 50 o 50+, aplicarla 15 minutos antes de esquiar y, después, cada dos horas.