MADRID, 19 Jun. (EUROPA PRESS) -
El accidente cerebrovascular isquémico, a diferencia de la hemorragia causada por un traumatismo contundente, se produce cuando un vaso sanguíneo que suministra oxígeno al cerebro se obstruye debido a un coágulo sanguíneo, generalmente formado en el corazón o en una arteria del cuello. Estas obstrucciones, responsables del 87% de todos los accidentes cerebrovasculares, suelen provocar discapacidad permanente o la muerte.
Métodos de tratamiento de datos obtenidos mediante la acumulación de más de 1 millón de variables en un programa del HonorHealth Research Institute (Estados Unidos) conocido como HALO (que significa HonorHealth Acute neuroLogical Outcome) han logrado que mayor número de pacientes estén sobreviviendo y recuperándose de la forma más común y grave de accidente cerebrovascular.
Este nuevo procedimiento es crucial para minimizar el daño cerebral y mejorar las posibilidades de que los pacientes recuperen la función independiente después de un accidente cerebrovascular, según el doctor Shashvat Desai del HonorHealth quien presenta sus hallazgos iniciales de HALO en la 11a Conferencia de la Organización Europea de Accidentes Cerebrovasculares 2025 en Helsinki, Finlandia.
"Creo que HALO puede ser la base de datos de accidentes cerebrovasculares más completa del mundo", insiste Shashvat Desai, especialista en neurología vascular e intervencionista, al describir el registro de accidentes cerebrovasculares HALO.
Cada caso de ictus de HonorHealth genera más de 330 datos clínicos, de imagen y administrativos que abarcan desde la edad, el sexo, la etnia y la ocupación hasta la evaluación, el diagnóstico, el tratamiento y el alta del paciente. Estos datos se han recopilado sobre más de 3000 pacientes con ictus de HonorHealth en los últimos tres años, lo que ha dado lugar a más de un millón de variables registradas.
"HALO se creó porque, durante la última década, el tratamiento del ictus cerebral ha experimentado una transformación drástica, pasando de ser una enfermedad diagnosticable a una altamente tratable", informa el doctor Desai. "Con esta asombrosa transformación, era necesario, por supuesto, una contabilidad sólida; desarrollar una base de datos donde pudiéramos monitorear y dar seguimiento al progreso de los pacientes... cómo los nuevos tratamientos están afectando la atención del ictus y cómo podemos mejorar".
HALO integra datos desde cuatro perspectivas: avances científicos, mejoras de calidad, colaboración e innovación. Aproximadamente uno de cada ocho de los más de 800 pacientes con accidente cerebrovascular tratados anualmente en los centros HonorHealth se someten a un procedimiento llamado trombectomía mecánica, un procedimiento mínimamente invasivo que utiliza herramientas de succión y stents para reabrir los vasos sanguíneos bloqueados.
Una medida del éxito es si se puede despejar una obstrucción mediante el llamado "primer paso" de estas herramientas en los primeros 30 minutos tras el procedimiento. El tiempo es crucial, ya que cuanto más células cerebrales mueren, más tiempo se priva de oxígeno a una zona del cerebro. De esta forma, Desai asegura que HonorHealth completa este "primer paso" de desobstrucción en la mayoría de estas operaciones.
"Los datos son la nueva fiebre del oro en muchos sentidos. Podemos extraerlos y generar nuevos conocimientos que conduzcan a nuevos tratamientos. Esto nos ayuda a mantener la competitividad en la investigación, pero también a mejorar la calidad de la atención para los pacientes de HonorHealth", agrega el doctor Desai, señalando que los datos de HALO ya están ayudando a prevenir accidentes cerebrovasculares secundarios, que afectan a aproximadamente el 20% de los pacientes.
Se están desarrollando programas similares a HALO en los principales centros de accidentes cerebrovasculares de todo el mundo, y el equipo de investigadores está trabajando para garantizar que los datos que producen puedan compartirse, produciendo mejores resultados para los pacientes.