MADRID, 9 Ene. (EUROPA PRESS) -
Mantener los óvulos en estasis durante la infancia es una parte clave de la fertilidad femenina y ahora una nueva investigación publicada este lunes en 'Nature Structural and Molecular Biology' arroja algo de luz sobre el papel de la epigenética en el mantenimiento de los óvulos en esta situación, que los mantiene "en suspenso" durante la infancia hasta que son necesarios en la edad adulta.
Un equipo dirigido por el doctor Gavin Kelsey, del Instituto Babraham, en Reino Unido, y sus colegas en Dresden y Munich, Alemania, estudiaron una proteína llamada MLL2 y descubrieron cómo produce un patrón distintivo de marcas epigenéticas que son necesarias para la estasis de las células de óvulos.
Un óvulo fertilizado es el comienzo de cada vida humana, pero las células de un óvulo se crean dentro del cuerpo de una mujer antes de que nazca y los óvulos se mantienen en estasis durante toda la infancia hasta que se necesitan como adultos. Si las células de óvulo no entran en estasis no pueden convertirse en huevos maduros y nunca tendrán la oportunidad de formar una nueva vida.
Poner un óvulo en estasis implica agregar muchas marcas epigenéticas en todo su ADN. Las marcas epigenéticas adjuntas al ADN actúan como notas a pie de página, indicando qué genes se activan o desactivan. Los científicos querían entender de dónde vienen estas marcas en las células de huevo y cómo los errores pueden causar enfermedades, pero es particularmente difícil estudiar la epigenética en los óvulos, ya que hay muy pocos. El equipo tuvo que crear nuevas formas altamente sensibles para detectar marcas epigenéticas en un número tan pequeño de células.
Usando este enfoque, los científicos descubrieron que, a medida que se desarrollan los óvulos, una marca llamada H3K4me3 se extiende por todo el genoma. Los científicos ya han visto la misma marca cerca del inicio de genes activos en muchas células, pero el equipo descubrió que su papel en las células de huevo es diferente. Estos expertos mostraron que la proteína MLL2 es responsable de esta colocación inusual de H3K4me3 en óvulos. Sin MLL2, la mayoría de las marcas de H3K4me3 en las células de huevo se pierden y las células mueren antes de tener la oportunidad de formar una nueva vida.
La primera autora de este trabajo, la doctora Courtney Hanna, señala: "Nuestros hallazgos muestran que H3K4me3 se crea de dos maneras: MLL2 puede agregar la marca H3K4me3 sin actividad genética cercana mientras que otro proceso, que no usa MLL2, coloca la misma marca alrededor de los genes activos. Al estudiar este nuevo mecanismo esperamos expandir nuestro conocimiento de la epigenética en general, así como aumentar nuestra comprensión de la fertilidad".
A ello, el científico principal, el doctor Kelsey, agrega: "Estamos comenzando a desentrañar los detalles de la conexión entre la epigenética y el desarrollo del huevo, un aspecto fundamental de la biología que puede desempeñar un papel en la transmisión de información de la madre al feto. Descubrimientos como este añaden más luz sobre los inusuales procesos biológicos que tienen lugar en estas células altamente importantes".