Gripe.-Empresas de calidad ambiental en interiores elaboran un decálogo para prevenir los contagios en espacios cerrados

Actualizado: martes, 18 agosto 2009 14:21

MADRID 18 Ago. (EUROPA PRESS) -

La Federación de Empresas de Calidad Ambiental en Interiores (FEDECAI) ha elaborado un decálogo de buenas prácticas para minimizar el riesgo de transmisión de enfermedades como la gripe A en los edificios cerrados y fomentar la prevención básica asociada a estos espacios, "que hasta el momento ha sido ignorada en gran parte", según informó la asociación en un comunicado.

Según el presidente de FEDECAI, Paulino Pastor, "estas medidas de prevención no deben obviarse, puesto que alrededor del 25 por ciento de los contagios se pueden producir sin mantener contacto directo con enfermo alguno y simplemente por la suspensión de este virus en el ambiente".

En este sentido, "aunque el contagio directo a través del contacto con personas afectadas o en el entorno cercano es sin duda la vía principal de transmisión de esta enfermedad, diversos estudios ponen de manifiesto que entre un 25 y un 35 por ciento de las personas que contraerán esta enfermedad lo harán de manera indirecta, es decir, a través de las microgotas (gotas menores de 5 micrones con virus que quedan suspendidas en el aire)", explicó FEDECAI.

Entre los consejos del decálogo se destaca la importancia de incrementar la ventilación del edificio "tanto como sea posible desde un punto de vista técnico y económico"; disponer de filtros de alta eficacia, con capacidad para retener las partículas más finas y, por tanto, controlar mejor su suspensión en el aire; y emplear sistemas de radiación ultravioleta sencilla o con fotocatálisis para controlar la dispersión de partículas infecciosas.

Asimismo, también se recomienda minimizar la densidad de ocupación de los espacios cerrados (máximo de 4 personas por cada 10 metros cuadrados); asegurar una humedad relativa cercana al 50 por ciento, evitando extremos por debajo de 40 y por encima de 60; mantener temperaturas por encima de 20ºC durante todo el año; evitar las corrientes de aire frío directas; e implantar protocolos de inspección y control de la calidad del aire para verificar todas las medidas anteriores.