BUENOS AIRES (ARGENTINA), 8 (EUROPA PRESS)
El Gobierno argentino pidió hoy a las empresas privadas sumarse al día libre que cumplirá la administración pública el próximo viernes, 10 de julio, como una medida que busca evitar la propagación del virus H1N1 que ha dejado unos 70 muertos en el país.
Mediante un decreto, el Gobierno que preside Cristina Fernández decretó el día libre en todos los organismos públicos del país que estén a cargo de la administración central y, aunque evitó declarar feriado nacional obligatorio, instó a todos los privados "a implementar medidas de similar tenor".
Argentina es el tercer país del mundo con mayor cantidad de muertes provocadas por la nueva gripe, después de México y Estados Unidos. En 23 provincias ha sido decretado el estado de alerta sanitaria. El Ministerio de Salud informó esta semana de que habían sido confirmados unos 2.800 casos del virus H1N1.
Sin embargo, las autoridades de Buenos Aires, la ciudad con mayor número de contagiados, han anunciado que no adoptarán esta medida, pese a que el Gobierno de la provincia homónima donde se encuentra la capital se ha mostrado de acuerdo con el día libre. "Desde el punto de vista epidemiológico, nosotros no estamos de acuerdo con el asueto", indicó el ministro de salud de la capital argentina, Jorge Lemus.
Asimismo, el secretario general capitalino, Marcos Peña dijo que "tal y como esta tomada la medida no tiene un efecto sanitario y es discriminatoria" porque sólo involucra al sector público. "Si tomamos esa medida, que tiene un altísimo costo a nivel social, hay que hacerlo con rigor científico", dijo hoy en declaraciones citadas por el diario local 'La Nación'.
A este respecto, el ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, Claudio Zin, consideró que "todo el mundo debería dictar el asueto el viernes" al considerar que se trata de una "recomendación razonable" porque "siempre es bueno evitar aglomeraciones públicas".
Por otra parte, el Ministerio de Salud de Argentina informó de que el próximo viernes recibirán 500.000 nuevas vacunas que se sumarán a las 300.000 que ya se entregaron "con el objetivo de que todos los hospitales del país puedan atender los requerimientos".
