MADRID 2 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) ha reforzado las medidas de prevención ante la gripe aviar al incluir ocho nuevos humedales en la lista de zonas de especial riesgo, que recoge así un total de 34, según informó hoy el Departamento.
Además de incluir nuevos humedales, la orden ministerial que se publicará próximamente en el Boletín Oficial del Estado (BOE) crea zonas de especial vigilancia y delimita los municipios situados dentro o alrededor de las zonas de riesgo, en los que se establecerán medidas especiales de bioseguridad.
La nueva lista incluye humedales de Andalucía (1), Comunidad Valenciana (6), y Galicia (1), y agrupa algunos de los que figuraban por separado en la anterior relación que se incluía en la orden ministerial de noviembre de 2006.
En Andalucía se ha incluido como humedal de riesgo al de Laguna de Fuentepiedra en las provincias de Málaga y Sevilla, mientras que en Galicia se considerará humedal de riesgo por gripe aviar el complejo intermareal de O Grove-Umia y Carrión de Pontevedra.
En la Comunidad Valenciana se han incorporado a la lista de humedales Marjal de Borrons y Marjal dels Moros (Valencia), Marjal de Pego-Oliva y Mata de Torrevieja (Alicante), y Prat de Cabanes y Marjal de Almenara (Castellón).
En los municipios situados dentro o alrededor de estas zonas de riesgo queda prohibida la cría de aves de corral al aire libre, así como la cría conjunta de patos y gansos junto con otras especies de ave de corral.
Por razones epidemiológicas, ecológicas o geográficas, también se prohíbe dar agua a las aves de corral procedentes de depósitos de agua a los que puedan acceder las aves silvestres, para evitar riesgos de propagación de la influenza aviar.
La orden crea áreas de especial vigilancia frente a la gripe aviar en las que se ha constatado la concentración elevada de aves silvestres o una densidad elevada de explotaciones de aves de corral próximas a aves silvestres.
En estas áreas se aplicarán determinadas medidas específicas, como el registro de explotaciones no comerciales y el censado de aves, así como la toma de muestras intensiva y las visitas de control sanitario.
En los parques zoológicos ubicados en las zonas de riesgo se ha establecido el aislamiento del mayor número posible de aves, tanto en instalaciones de interior como a través de aviarios e instalaciones temporales, y deberán vacunarse bajo supervisión oficial aquellas aves sensibles que no puedan aislarse.