MADRID, 8 Ene. (Reuters/EP) -
El experto genetista Robin Lovell-Badge, organizador de la conferencia en la que el científico chino He Jiankui anunció que había creado los primeros bebés modificados genéticamente, ha criticado la actuación del investigador por poner vidas en peligro y no tener formación en biología.
En declaraciones a los periodistas en Londres, Lovell-Badge, profesor y experto en genética del Instituto Francis Crick (Reino Unido), ha calificado a He como un hombre rico con un "gran ego" que "quería hacer algo que cree que cambiará el mundo".
He Jiankui, profesor asociado de la Universidad de Ciencia y Tecnología del Sur en Shenzhen (China), ha provocado una disputa científica y ética internacional cuando anunció en la Cumbre de Edición del Genoma Humano, celebrada en noviembre en la Universidad de Hong Kong, que había utilizado la tecnología CRISPR-Cas9 para alterar los genes embrionarios de unas gemelas nacidas en noviembre.
El científico chino se defendió diciendo que realizó la modificación genética para ayudar a proteger a las bebés de una futura infección de VIH. Pero la universidad en la que realizó este experimento indicó que fue una "grave violación de la ética y los estándares académicos", y expertos de todo el mundo la condenaron, calificándola de monstruosa y peligrosa.
"Si es verdad (que editó los genomas de la manera que dice), entonces es posible que haya puesto en riesgo la vida de las niñas. Nadie sabe lo que harán estas mutaciones", ha señalado Lovell-Badge, que ha puntualizado que se enteró de lo que He asegura haber hecho en la víspera de la conferencia y que tuvo una reunión de urgencia con él.
Para este genetista, He carece de "formación básica en biología" y los experimentos que dijo que había llevado a cabo "ignoraron todas las normas [que indican] cómo se llevan a cabo ensayos clínicos o experimentos". "Ciertamente, se debe evitar que vuelva a hacer algo así", ha apuntado Lovell-Badge.
Las autoridades e instituciones chinas, así como cientos de científicos internacionales, condenaron a He y dijeron que cualquier aplicación de edición de genes en embriones humanos con fines reproductivos estaba en contra de la ley y la ética médica. Las autoridades chinas están investigando a He y, mientras tanto, han detenido este tipo de estudios científicos.