MADRID 26 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Federación Española de Cáncer de Mama (FECMA) expresó hoy en un comunicado su defensa de las mamografías como mejor alternativa disponible para reducir la mortalidad por la enfermedad y aconseja a las mujeres acudir siempre a las revisiones a las que sean convocadas, considerando que los índices de participación en los programas de detección precoz deberían situarse por encima del 80 por ciento.
La federación lamentó que "por alguna razón interesada, alguna noticia difunda que se ponen en cuestión los beneficios de las mamografías". "Afortunadamente", señaló, "la experiencia y los datos científicos contrastados, confirman que la mamografía sigue siendo hoy en día el mejor instrumento para detectar un cáncer de mama".
Según explicó, existe un consenso bastante generalizado sobre el tramo de edad para comenzar las campañas de detección precoz, establecido entre los 50 y los 69 años, aunque hay algunas comunidades autónomas que comienzan a hacer el cribado a la edad de 45 años. "Seguramente la tendencia es comenzar a los 45 años, pero debe ser la comunidad científica la que confirme los beneficios de modificar a la baja la edad de referencia para comenzar a hacerse una mamografía", señaló la federación.
En los casos individuales, en los que por causa de antecedentes familiares, por detectarse cualquier anomalía, o por otras circunstancias, la edad inicial no sea un factor determinante para hacer una mamografía, pero "deben ser los profesionales de la sanidad los que oriente a la mujer en una u otra dirección", afirmó.
En todo caso, "las campañas de detección precoz de cáncer de mama deben ser promovidas por el Sistema Público de salud, con acceso gratuito, continuadas en el tiempo, dotadas de los recursos necesarios con controles de calidad, desarrolladas por personal formado y evaluadas en sus resultados, incluyendo los índices de participación", recalcó.
Igualmente, la federación expresó su apoyo a "los esfuerzos para mejorar la eficacia en los tratamientos oncológicos, sobre la base de una asistencia integral y con planes terapéuticos personalizados". En el que creen que "deben incluirse los cuidados paliativos para pacientes de cáncer de mama en estadios avanzados".