La Federación de la Cruz Roja denuncia que las epidemias suponen una carga adicional para los países en desarrollo

Actualizado: lunes, 6 julio 2009 14:09

MADRID, 6 Jul. (EUROPA PRESS) -

La Federación Internacional de la Cruz Roja y de las Sociedades de la Media Luna Roja (FICR) manifestaron hoy su preocupación porque la creciente carga que las epidemias tienen sobre el desarrollo social y económicos en los países pobres no se está tratando de forma adecuada.

En nuevo informe publicado hoy, el FICR reconoce que las enfermedades no contagiosas, como un cáncer o los ataques al corazón, lideran ahora las causas de muerte en todo el mundo, pero reivindica que utilizar sólo índices de mortalidad para medir el impacto de las enfermedades distorsiona la verdadera carga de epidemias en los países en desarrollo.

"Las consecuencias económicas y sociales de las epidemias en los países desarrollados deben ser evaluadas de una mejor forma", aseguró un responsable de salud para emergencias del FICR en Ginebra, Tammam Aloudat. "A la gente a quienes golpean las epidemias suelen morir o --por ejemplo, en el caso de la polio-- convertirse en discapacitados en sus años más productivos, cuando son jóvenes", añadió.

"Su muerte o incluso estar enfermos durante mucho tiempo les impide utilizar las herramientas que adquirieron en la escuela, cultivar su tierra o cuidar a sus parientes, por dar sólo algunos ejemplos", anotó.

El informe menciona la fiebre del dengue, una mortalidad con un índice relativamente bajo de mortalidad --18.000 muertes al año-- pero que afecta a nueve millones de personas que no pueden continuar con su vida normal. El informe también alerta contra la "complacencia" hacia las epidemias en los países desarrollados y la denomina como una "gran amenaza en sí misma".

"El regreso de enfermedades como el sarampión en Europa occidental demuestra que si ignoramos la carga creciente de las enfermedades contagiosas en los países no desarrollados y no afrontamos la amenaza en las economías más avanzadas, hay un riesgo de que también les afecte con consecuencias graves", afirmó Aloudat.

"Esto es por lo que deberíamos contar con una preparación eficaz para posibles pandemias que ignoran fronteras, como la actual de gripe A (H1N1)", añadió. "No hay una fórmula sencilla para luchar contra las epidemias", continuó. "Reducir el impacto implica dirigir cuestiones complejas como la prevención de la enfermedad, dar más poder a las comunidades y un mejor acceso a los servicios sanitarios a nivel comunitario", aseguró.

"Las enfermedades contagiosas son los enemigos del desarrollo, el círculo vicioso de enfermedad y bajos recursos tiene que romperse si se pretenden alcanzar las metas del desarrollo", añade el informe. "En una situación global donde son escasos los recursos para afrontar las epidemias, es esencial canalizar los recursos de manera rápida y en las intervenciones que no sólo darán tratamiento sino que estimularán un cambio de comportamiento que lleve a una cultura de prevención", concluye el informe.