Factores como el estrés aumentan el dolor cervical crónico

Más de la mitad del sector empresarial femenino sufre dolores de cuello y cervicales.
Más de la mitad del sector empresarial femenino sufre dolores de cuello y cervicales. - GETTY//4774344SEAN - Archivo
Publicado: martes, 9 julio 2019 10:45


MADRID, 9 Jul. (EUROPA PRESS) -

Existen factores cognitivos, conductuales y emocionales como el estrés asociados al dolor cervical crónico que acentúan y hacen menos sorportable esta dolencia, según ha destacado Yolanda Pérez, profesora del departamento de Enfermería y Fisioterapia de la Universidad de Alcalá (UAH) de Madrid.

En este contexto, la experta ha estudiado el dolor cervical en su dimensión como dolor social en centros de Atención Primaria de la red de salud pública. Así, ha concluido que una mala noticia puede incrementar la dolencia en las cervicales, lo que supone que situaciones de estrés influyen en esta enfermedad, por lo que muchos especialistas defienden que "cuanto mayor sea el dolor crónico cervical, más atención hay que prestar al estado de salud mental".

De este modo, la docente ha explicado que muchos expertos no desarrollan esta parte afectiva en sus consultas por incomodidad, por el reducido tiempo de atención disponible o porque hablar del dolor de los otros puede despertar su propio dolor. Los pacientes son conscientes de esta barrera y por ello han puesto de relieve el hecho de que el doctor obvie su estado anímico a la hora de realizar el diagnóstico.

Así, se hace un llamamiento a los expertos para pedir una escuchar activa hacia los pacientes, ya que "está comprobado que una forma de aliviar el dolor social es expresarlo, darlo a conocer a los otros", ha destacado Pérez.

En este sentido, la experta ha elaborado un perfil del paciente habitual del dolor cervical crónico, que ha apuntado ser una persona mayor de 50 años, mujer, con poca disposición a lo nuevo, con escasa disposición al riesgo e inclinación a evitar el daño.

A modo de recomendación para aquellos pacientes que sufren este tipo de dolencia, ha aconsejado recibir todos los cuidados profesionales relacionados con su patología física y disponer de una personas de confianza con la que poder desahogarse.

Además, ha hecho hincapié en mantener una alimentación y hábitos de vida saludables, como realizar actividad física frecuente o descansar durante las horas de trabajo cuando éste nos obligue a estar en una postura fija durante todo el tiempo. A nivel anímico, ha señalado la "importancia" de las relaciones sociales y el bienestar emocional.