VALNCIA, 12 Dic. (EUROPA PRESS) -
Un equipo internacional de investigación --con destacada participación de la Universitat de Valncia (UV)-- ha descubierto que en el proceso de expresión de la información genética algunas proteínas realizan un viaje de ida y vuelta a bordo del RNA mensajero desde el núcleo hasta el citoplasma y viceversa, y permutan así información esencial para que las células puedan sobrevivir a los cambios ambientales.
El trabajo, que aparece publicado en 'Nature Communications', ha estudiado cómo la información genética ubicada en el núcleo de las células humanas se utiliza en los procesos que mantiene viva a la célula, es decir, en la expresión del genoma. En ellos, el DNA se debe copiar a RNA, que llevará el mensaje al citoplasma, fuera del núcleo celular, donde se usará para fabricar las proteínas, ha indicado la UV en un comunicado.
El RNA quedará destruido tras haber cumplido su misión de mensajero, ya que no es estable como el DNA. En este sentido, el estudio destaca que, así como el genoma es estable y hereditario, la expresión de la información genética varía continuamente porque las circunstancias a las que se enfrentan las células también son variables, y esto permite a los seres vivos sobrevivir en un ambiente cambiante.
Hasta ahora se pensaba que el RNA mensajero partía del núcleo, llevando consigo instrucciones para su función en el citoplasma, y perdía la comunicación con el genoma. La expresión de la información genética era, pues, unidireccional desde el DNA al RNA, desde el núcleo al citoplasma.
Sin embargo, el equipo internacional de investigación en el que participa el grupo dirigido por el investigador en el Instituto de Biotecnología y Biomedicina (BioTecMed) de la Universitat de Valncia José E. Pérez-Ortín propuso que el genoma recibe también noticias desde el citoplasma sobre aquello que le está ocurriendo al RNA en tiempo real y que esta información la utiliza para decidir si necesita fabricar más o menos RNA.
En este trabajo, el equipo ha descubierto, usando levaduras como modelo de estudio, que la información sobre la situación del RNA en el citoplasma la transmiten algunas proteínas que viajan con el RNA mensajero desde el núcleo al citoplasma y regresan al núcleo una vez el RNA es destruido, esta vez de forma autónoma sin usar el RNA como transportista.
De esta forma, la investigación ha concluido que el proceso de expresión de la información genética es circular, y no lineal como se pensaba antes. Este proceso de intercambio recíproco de información es esencial para que las células puedan responder y sobrevivir a los cambios ambientales y al estrés.
El trabajo ha sido dirigido por el grupo de Mordechai Choder, del Technion-Israel Institute of Technology. El grupo de Genómica Funcional de Levaduras de la Universitat de Valncia, en BioTecMed, ha sido el responsable de la realización de las diferentes técnicas genómicas que han permitido demostrar que el fenómeno de la expresión génica circular tiene un carácter global y afecta a todos los genes de la célula.