La exposición de los bebés a 'C. difficile' les inmuniza contra la infección

Imagen de un bebé
Imagen de un bebé - FUNDACIÓN UNICAP - Archivo
Publicado: jueves, 8 agosto 2019 11:35


MADRID, 8 Ago. (EUROPA PRESS) -

Un grupo de investigadores del Ann & Robert H. Lurie Children's Hospital of Chicago (EE.UU) han concluido que la exposición a la bacteria 'Clostridium difficile' en los lactantes produce una inmunización natural que podría proteger contra esta infección en los años posteriores.

El estudio, publicado en la revista 'Clinical Infectious Diseases', ha descubierto que aquellos bebés que estaban expuestos a este germen y se colonizaron con el mismo presentaban anticuerpos en su sangre que permitían neutralizar las toxinas que causan la infección por 'C. difficile'.

De este modo, los análisis utilizados durante el estudio han destacado que esta neutralización previene al resto de células expuesta a estas toxinas de efectos nocivos. Así, los investigadores han puesto de relieve que se produce una inmunización natural, sin embargo, aún queda por demostrar si evitaría la enfermedad tras otra futura exposición a esta bacteria.

No obstante, Larry Kociolek, del Instituto de Investigación Infantil Stanley Manne en Ann & Robert H. Lurie Children's Hospital of Chicago y autor del estudio, ha destacado que "somos optimistas porque sabemos por estudios previos que los adultos con anticuerpos antitoxinas tienen un menor riesgo de enfermedad por infección por 'C. difficile'".

Aproximadamente la mitad de los bebés se exponen a esta bacteria, pero normalmente no llegan a enfermar por ella. En el caso de los niños mayores y los adultos presentan síntomas como diarrea, que debe ser tratada con antibióticos.

Asimismo, los niños suelen tener síntomas más leves que los adultos y la incidencia pediátrica de esta infección es mayor entre los menores de 1 y 4 años y durante la adolescencia. En caso de que exista complicación en la infección, puede desarrollarse inflamación del colon, que requiere cirugía y podría llegar a ser mortal.

En este contexto, el experto ha concluido que los niños pequeños que se han enfermado por esta bacteria probablemente no fueron expuestos a la misma cuando eran bebés, "por lo que no han desarrollado inmunidad", y ha añadido que se necesitan ensayos clínicos pediátricos que permitan disponer de una vacuna para niños y adolescentes.