VALNCIA 2 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Colegio de Dietistas-Nutricionistas de la Comunitat Valenciana (CODiNuCoVa) ha alertado, con motivo del Día Mundial Contra el Cáncer, de un aumento de la ortorexia --trastorno de la conducta alimentaria que afecta a las personas que se obsesionan irracionalmente por comer sano convirtiéndose así en su principal preocupación-- entre los pacientes oncológicos, principalmente mujeres jóvenes.
La nutricionista Victoria M. Góngora, especialista en nutrición oncológica, ha explicado en un comunicado que el origen de este trastorno mental entre las pacientes oncológicas "nace de querer controlar los síntomas de su cáncer o los efectos secundarios del tratamiento que reciben". Esto ocurre, entre otras cuestiones, "porque no cuentan con un asesoramiento ni seguimiento por parte de un dietista-nutricionista dentro del equipo sanitario que la trata ni tampoco de un profesional de la psicooncología".
Esta circunstancia lleva a adquirir comportamientos "que no son saludables y que no necesariamente mejoran su calidad de vida ni su estado físico". "Estas pacientes pretenden controlar la enfermedad a través de la alimentación, restringiendo grupos de alimentos, incluyendo suplementos, lo cual fomenta miedos y culpa ante la ingesta de alimentos. Esto puede generar trastornos psicológicos, como la ortorexia si no se abordan", ha indicado la profesional de la nutrición.
Tal y como ha explicado Luis Cabañas, presidente del CODiNuCoVa y experto en nutrición oncológica, "un peor estado nutricional está relacionado con mayor reingreso hospitalario, menor calidad de vida y mayor mortalidad. Es fundamental prevenir y tratar la desnutrición asociada al cáncer, ya que hasta un 80% de pacientes podría presentar desnutrición a lo largo de la enfermedad". Para ello es "fundamental" integrar a los y las dietistas-nutricionistas como parte del equipo multidisplinar en los servicios de Oncología, ha dicho.
Y es que actualmente las personas diagnosticadas de cualquier tumor en la Comunitat Valenciana no tienen acceso a un profesional de la Nutrición a través de la red pública sanitaria. "Esta falta de acceso a dietistas-nutricionistas pone en peligro a pacientes y familiares que buscan información nutricional por su cuenta, recurren a numerosas dietas milagro y suplementos y tienen riesgo de padecer estados de desnutrición que comprometen su tratamiento oncológico y su salud", han alertado los expertos.
Un buen estado nutricional es "clave" para tolerar mejor los efectos del tumor y los tratamientos oncológicos. Por lo tanto, "omitir este tratamiento a un paciente con cáncer no sólo reduce sus posibilidades de tolerar tratamientos tan agresivos, sino que limita el beneficio de los siguientes pasos terapéuticos durante el largo recorrido clínico", ha explicado Victoria M. Góngora.