Los expertos esperan un "tsunami de casos de Alzheimer" en los próximos años

Actualizado: martes, 11 enero 2011 15:08

MADRID 11 Ene. (EUROPA PRESS) -

Actualmente hay en España entre 650.000 y 800.000 enfermos de Alzheimer, aunque el progresivo envejecimiento de la población favorecerá que en los próximos años se produzca "un tsunami de casos" hasta el punto que en 2050 se triplicará el número de afectados por esta enfermedad neurodegenerativa.

Así lo asegura en una entrevista a Europa Press el secretario general de la Fundación Alzheimer España, Jacques Selmes, quien reconoce que dentro de 40 años España será el segundo país más envejecido del mundo después de Japón, un dato "clave" para esta enfermedad ya que el 90 por ciento de los casos se diagnostica en personas de más de 65 años.

"En 2050 podría haber más de dos millones de afectados", reconoce este experto, que además advierte de que estas cifras corresponden "sólo a pacientes diagnosticados". De hecho, explica Selmes, se estima que la cifra total de afectados puede ser hasta el doble, ya que existe un "infradiagnóstico generalizado en todos los países".

Esto se produce por varias razones, "bien porque no acude al médico cuando aparecen los síntomas o porque el médico no le da importancia", aunque, en cualquier caso, "impide que muchos pacientes puedan recibir un tratamiento al inicio de la enfermedad".

Aunque el tratamiento actual es sintomático y no impide que las lesiones cerebrales siguen con su evolución, estos "tienen una eficacia limitada en el tiempo", siendo "más activos" cuando se utilizan en una fase precoz de la enfermedad.

Además, el diagnóstico precoz "favorece que estos pacientes tengan suficiente capacidad intelectual para entender que tiene una enfermedad" y poder tomar decisiones para el futuro, como voluntades anticipadas o firmar un poder notarial "para cuando no pueda tomar decisiones".

Por otro lado, y pese a que en edades más tempranas esta enfermedad es menos frecuente, el doctor Selmes reconoce que en un porcentaje pequeño se detecta en personas de entre 40 y 50 años. En estos caso, añade, "la enfermedad plantea problemas totalmente distintos porque son personas con actividades profesionales y responsabilidades, no con la vida de un jubilado".