MADRID 10 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Confederación Autismo ha destacado la importancia de mejorar el conocimiento de la salud mental en las personas con autismo, ya que siete de cada diez pacientes presentan, al menos, un trastorno comórbido de salud mental a lo largo de su vida y experimentan altos niveles de malestar psicológico.
Asimismo, los datos de prevalencia para las personas con TEA son en general más altos que el resto de la población, y es común que manifiesten más de un trastorno comórbido, siendo los más frecuentes los trastornos del estado de ánimo (depresión) y los trastornos de ansiedad, que afectan en mayor medida a las personas con TEA mayores de 40 años.
No obstante, la organización ha informado de que también se presentan otros trastornos con una frecuencia relativamente alta, los cuales que tienden a disminuir a partir de los 55 años de edad. En niños, niñas y adolescentes se han encontrado tasas de un 70 por ciento con trastornos clínicamente diagnosticados, teniendo el 40 por ciento más de un trastorno comórbido asociado.
Entre ellos, los más frecuentes señalan la ansiedad, los déficits atencionales y el trastorno negativista desafiante. "Disponer de un diagnóstico y una intervención temprana son claves para minimizar su impacto y promover un afrontamiento positivo de estas condiciones de salud", han dicho desde la confederación.
Y es que, tal y como han lamentado los expertos, en muchas ocasiones esta sintomatología psiquiátrica resulta infradiagnosticada en el trastorno del espectro autista, asumiéndolo en ocasiones como manifestaciones de las propias características nucleares del trastorno.
Además, la identificación de los síntomas es "más compleja" en aquellas personas que presentan una discapacidad intelectual asociada y déficit en el lenguaje, lo que puede provocar no abordarlo mediante las intervenciones y mecanismos adaptados al caso y a la persona.
"No cabe duda que es necesario más investigación a este respecto, puesto que la falta de medidas y herramientas específicas validadas para su identificación y evaluación en personas con autismo hace difícil abordar estas cuestiones relativas a la comorbilidad del autismo y de los trastornos que afectan a la salud mental. Resulta esencial incrementar el conocimiento sobre la prevalencia de estos trastornos y la relación con otras variables, con el objetivo de facilitar su detección y contribuir al desarrollo y puesta en marcha de estrategias de intervención y abordaje integral", ha apostillado la organización.
A su juicio, el abordaje específico de los trastornos psiquiátricos presentes en el trastorno del espectro autista supondrá no sólo una mejora en la calidad de vida de las personas esta patología, a través el incremento de la capacitación de los profesionales que trabajan en los servicios de atención y apoyo al colectivo, sino que también contribuirá al diseño de políticas públicas y medidas "eficaces, eficientes y sostenibles" para darles respuesta a sus necesidades específicas.