MADRID 8 Feb. (EUROPA PRESS) -
Más del 90 por ciento de los casos de diabetes diagnosticados en España se etiquetan como diabetes tipo 2, sin embargo, sus factores etiopatogénicos, su evolución natural o sus complicaciones las hace diferentes y, por ello, endocrinólogos apuestan por establecer fenotipos y adoptar una forma más personalizada de clasificar a las personas con diabetes tipo 2, incluso aquellas que en estos momentos se consideran que están en un estadio de prediabetes.
"En el caso de la diabetes tipo 2, el término prediabetes es pernicioso, ya que, entre otras cosas, no refleja una situación real y traslada al paciente y al profesional sanitario la idea de que aún no hay enfermedad, cuando en realidad alude a una situación clínica en la que sí existen trastornos que, en la mayor parte de los casos, terminarán por provocar eventos clínicos importantes", según ha expuesto el doctor Fernando Gómez Peralta, vicepresidente de la Sociedad Castellano-Leonesa de Endocrinología y Nutrición (SCLEDyN) y jefe de la Unidad de Endocrinología y Nutrición del Hospital General de Segovia.
El experto, que ha participado en la reunión Ágora Diabetes 24, un encuentro organizado por la Sociedad Castellano-Leonesa de Endocrinología y Nutrición (SCLEDyN) con el apoyo de Sanofi España, ha propuesto un nuevo algoritmo de estadiaje de la DM2 similar al que ya se acepta y maneja en el caso de la diabetes tipo 1, donde se tiene en cuenta un abordaje fisiopatológico y conocimientos de la medicina de precisión
Además, propone que se incluyan en esta propuesta las opiniones recogidas de todos los expertos asistentes a este foro, sirviendo de base para una publicación científica sobre la que ya se está trabajando.
La propuesta de algoritmo de detección y manejo de la diabetes tipo 2 debatida en este encuentro parte de la idea central de superar el concepto de prediabetes y establece cuatro estadios de la enfermedad (dependiendo de la gravedad y el riesgo de complicaciones) y cuatro fenotipos clínicos básicos (déficit grave de insulina, resistencia grave a la insulina, diabetes leve asociada a obesidad y diabetes leve asociada a la edad), fijándose para cada uno de ellos objetivos específicos hemoglobina glicosilada (HbA1c) y tratamientos concretos.
Asumiendo también el hecho de que "no hay compartimentos estancos y que la enfermedad puede evolucionar o, incluso, revertirse", aclara el doctor Gómez Peralta. La edad, la adiposidad, la resistencia/secreción de insulina y la autoinmunidad son factores clave a tener en cuenta en esta propuesta de abordaje de la DM2.
Se trata de fusionar los avances registrados en el ámbito de la Medicina de Precisión, permitiendo establecer subtipos de diabetes dentro del 'cajón de sastre' que actualmente es la DM2, y hacer un abordaje terapéutico más fisiopatológico que se adapte mejor a las posibilidades de progresión de la enfermedad en cada persona. En definitiva, como resume Peralta, "queremos adaptar el estadiaje que actualmente se asume para la DM1 a la DM2, lo que nos permitiría subclasificar mejor cada caso, atendiendo a sus riesgos y perspectivas de progresión, y fijando el tratamiento más adecuado para cada subfenotipo clínico".
De hecho, según admite este experto, "tenemos la suerte de haber enriquecido nuestro arsenal terapéutico con fármacos potentísimos que, de forma segura (sin provocar hipoglucemias) e induciendo pérdidas de peso (en lugar de incrementarlo), están consiguiendo resultados compatibles con la remisión de la diabetes tipo 2".
En el caso de la diabetes tipo 1, una enfermedad con un claro componente autoinmune, este foro ha puesto de relieve los importantes avances registrados en los últimos años. Como subrayó en una conferencia magistral la doctora Chantal Mathieu, catedrática de Endocrinología del Hospital Universitario Gasthuisberg en Bélgica y presidenta de la Asociación Europea para el Estudio de la Diabetes (EASD), "ahora es posible hacer un abordaje preclínico de la DM1, disponiéndose de fármacos que están demostrando su capacidad para retrasar la progresión de esta enfermedad".
Sin duda, añade, "estamos en el comienzo de una nueva era en abordaje de esta enfermedad: aunque aún no es posible prevenir o revertir la diabetes tipo 1, cada vez estamos más cerca de conseguirlo".