MADRID 25 Abr. (EUROPA PRESS) -
La malaria quedó erradicada en Europa hace casi medio siglo pero, según la Asociación Nacional de Empresas de Control de Plagas (ANECPLA), la globalización, el desarrollo del turismo global y el transporte de mercancías puede favorecer que se puedan detectar nuevos casos en el continente, como ya ha pasado en algunos países de forma aislada.
Aunque esta enfermedad afecta en mayor medida a países del Tercer Mundo, sobre todo en el África subsahariana, según ha recordado esta entidad, esta enfermedad se sigue diagnosticando en el sistema sanitario español y, de hecho, hace un par de años se registró el primer contagio de malaria desde la erradicación de esta enfermedad en 1964, si bien se trató de un caso aislado.
Asimismo, en otros países europeos como Grecia se registró el pasado año el primer gran brote en el continente en casi medio siglo, con 61 afectados, que los expertos atribuyeron a fallos en los sistemas de control.
Por todo ello, ANECPLA hace un llamamiento a la sensibilización general ante problemas y enfermedades como la malaria y alerta de la posibilidad de que puedan detectarse nuevos casos en España y en Europa.
Además, advierte de que el calentamiento global de las temperaturas podría también llegar a alterar los agentes ambientales que influyen en la transmisión de la enfermedad, multiplicando las poblaciones de mosquitos o prolongando su época de actividad.
Por estas razones, "es fundamental controlar adecuadamente aquellas zonas donde estén existan poblaciones de mosquito 'Anopheles' causante de la enfermedad", ha apuntado el presidente de ANECPLA, Pedro de Orueta.
En concreto, De Orueta ha reconocido que aunque España cuenta con unas normativas higiénico-sanitarias exigentes y mantiene altos estándares de salubridad, "no queda libre de los efectos de la globalización", de ahí que se pida el aumento de las campañas de concienciación y una mayor sensibilización de las autoridades sanitarias para detectar los posibles casos que puedan producirse.
De igual modo, ha insistido en la necesidad de promover la colaboración entre administraciones, empresas y organismos del sector, y la cooperación internacional de los países, aumentando los mecanismos de control en puertos, aduanas y aeropuertos y las condiciones de salubridad y de los controles en los países que exporten mercancías.