MADRID 19 Nov. (EUROPA PRESS) -
En España nacen cada año unos 4.000 niños con una cardiopatía congénita que, en un alto porcentaje, puede presentar dificultades de aprendizaje y desarrollo escolar, según han advertido diferentes expertos en unas jornadas organizadas en Madrid por la Fundación Menudos Corazones, en colaboración con Pfizer.
Según ha destacado el director de Acceso y Relaciones Institucionales de Pfizer, Juan José F. Polledo, la supervivencia de estos niños ha aumentado en los últimos años y actualmente más del 90 por ciento consigue llegar a edad adulta, cuando "hace tan sólo unas décadas la cifra no superaba el 20 por ciento".
Sin embargo, un 80 por ciento de estos niños necesita tratamiento quirúrgico en el primer año de vida y posteriormente frecuentan el hospital en numerosas ocasiones, unos "largos periodos de hospitalización" que coinciden con etapas claves para su desarrollo e integración en el colegio.
Esta situación, según ha destacado la directora de la Fundación Menudos Corazones, Amaya Sáez, "se traduce en dificultades para leer y escribir, en el retraso en el lenguaje, falta de concentración y problemas de memoria".
Por ello, esta experta insiste en la necesidad de reforzar la investigación en este área que, actualmente, se caracteriza por "la falta de recursos para diagnosticar y abordar dichas dificultades".
Igualmente, la Fundación Menudos Corazones quiere fomentar y dar a conocer las llamadas 'Aulas hospitalarias' que incorporan algunos hospitales, a las que "pueden acudir los niños que durante el período de tiempo, más o menos largo, estén ingresados en un hospital".
De esta forma, continúan con el proceso educativo con total normalidad, aunque el niño esté fuera de su ambiente familiar, escolar y social", afirma Marta Medina, subdirectora y coordinadora del equipo psico-educativo de la Fundación Menudos Corazones.
Según coinciden estos expertos, dichas aulas se deben apoyar además con el servicio de apoyo educativo domiciliario, ya que cuando estos niños acaban la estancia en el hospital, "muchos permanecen en casa sin recibir apoyo educativo".*
Los niños que reciben este servicio reciben una media de seis horas semanales de atención educativa en sus domicilios en el primer ciclo de Educación Primaria, siete horas en el segundo ciclo y ocho en el tercero, y hasta nueve horas en los alumnos de Educación Secundaria.