MADRID 18 Jun. (EUROPA PRESS) -
El médico especialista en Nutrición David Mariscal ha recomendado a los padres que hagan partícipes a sus hijos en la elaboración de las comidas y que no les prohíban ningún alimento para conseguir que aprendan a comer sano.
Mariscal, que acaba de publicar el libro 'El Estiron', ha recordado la importancia que tiene que la elaboración de los platos sea original para que los más pequeños vean "apetitosas" determinadas comidas que normalmente no les suelen gustar como, por ejemplo, las verduras y el pescado.
"Si no les gustan las verduras hay que darles una guarnición que ellos mismos hayan cortado con el fin de que la ensalada tenga más color y variedad. Además, es importante que no le den pescado con espinas y que, en el caso en el que no les guste, se preparen purés, hamburguesas o croquetas que contengan ese alimento", ha asegurado este experto en declaraciones a Europa Press.
En este sentido, Mariscal ha sugerido que, una de las mejores formas de preparar el pescado para los más pequeños es cocerlo en papel de aluminio ya que, de esta forma, se consigue que esté más limpio y no huela.
Asimismo, ha destacado la importancia que tiene que no se le prohíba ningún alimento, como por ejemplo las gominolas, sino que sean los padres los que lo administren de una manera normal. "No les tienen que hacer ver que es un premio sino que es algo normal", ha recalcado.
SIN POSTRE SI NO COMEN
Dicho esto, Mariscal ha subrayado la necesidad de dejar entre 20 y 30 minutos a los hijos para que tomen la comida y que, una vez pasado el tiempo, recojan los platos y cambien de actividad. Además, ha recomendado que no se les dé postre en el caso en el que no se hayan comido lo que les han servido.
"Los más pequeños esperan al postre y si se les dice que lo van a tener sí se comen la comida. Sin embargo, en el momento en el que empiezan a ver que no hay palanca emocional que utilizar con sus padres y sólo les queda el camino de comerse lo que les pongan", ha recalcado este experto.
No obstante, Mariscal ha asegurado que estas pautas no serán efectivas si los padres no son los primeros que las llevan a cabo ya que, ha recordado, si los mayores no comen verduras los más pequeños tampoco lo harán. "Los niños no obedecen sino que imitan y si ven que no comes algo ellos no lo comerán", ha recalcado.
Del mismo modo, el experto ha recordado la importancia que tiene que los padres se involucren con sus hijos en las actividades al aire libre. Por ello, ha recomendado evitar que se sienten en casa a jugar a la videoconsola y propicien que salgan a la calle a montar en bicicleta o a hacer cualquier actividad deportiva que les consiga motivar. Este hecho, ha añadido, evitará que el pequeño tenga sobre peso u obesidad.
"A los niños de entre 5 y 12 años salir a hacer ejercicio con los padres es lo máximo y por eso es necesario que los mayores se involucren con ellos ya que la falta de ejercicio es la mitad del problema que hay respecto a los elevados índices de obesidad que hay en España", ha zanjado.